Usuario invitado
14 de agosto de 2023
Una pena que con lo amables que fueron en recepción y en los desayunos me "tocara" una habitación tan mala. La habitación no me gustó nada, tremendamente incómoda. Paso a detallarlo: La habitación tiene dos alturas, la cama esta "subida" sobre una especie de escalón ancho. Quiere decir que cuando vas al baño tienes que dar un paso y bajar el escalón que hay alrededor de la cama, lo que lo hace peligroso, y más de noche, simplemente porque es algo inusual y no lo ves. No entiendo como han podido diseñar una habitación así. Por otro lado, la pared del baño es de cristal lo que hace que carezcas de intimidad ya que desde la habitación se ve "todo", absolutamente todo lo que sucede en el baño. Si enciendes la luz del baño, y dado que la pared es de cristal, se ilumina la habitación. En fin, un desastre de diseño. Para rematar, el colchón es muy incómodo. El desayuno, un bufet, no es muy variado pero está bastante bien, además las personas que lo atienden son muy amables. Un diez para la camarera a la que pedí un zumo de naranja natural y una tortilla francesa. Todo buenísimo. Si todas las habitaciones del hotel son iguales no volvería.