Hostal Restaurante Boccalino

Reservamos las habitaciones con dos meses de antelación ( 4 habitaciones en total) por su ubicación. Entiendo que es un hostal no un hotel de lujo, pero la habitación no se ha correspondido, ni de lejos, con el precio que hemos pagado. 95 € (105€ con desayuno) por noche. La única ventana de la habitación, de por sí pequeña, era una ventana en el tejado que no se podía cerrar ni mantener abierta, la goma aislante del borde de la ventana caía por uno de los costados, manchas de humedad en la pared... Pedí un cambio de habitación y me dijeron que solo les quedaba otra y que no me la aconsejaban porque era peor. A la noche cuando volvimos, estaba otra chica en la recepción y el dueño por lo que aproveché para volver a comentar que la habitación no estaba bien. Tanto uno como otro nos trataron de muy malas maneras. El dueño me dijo que él a pesar de todo conseguía llenar el hotel y que si quería me devolvía le dinero y que me fuera , a pesar de que ya era más de medianoche. La ciudad merece la pena pero el alojamiento y el trato recibido han estropeado la experiencia.

Estafa, no nos dieron la comida y no nos devolvieron el dinerlo.Teníamos una despedida de Soltero, pagamos 50 € y por persona. El comedor sin luz, música altísima, nos pusieron 2 croquetas y 2 langostinos de inicio, pasarón 2 horas y no nos pusieron mas, reclamamos que el dueño diese explicaciones y no dio la cara, despues de dos horas marchamos. Una verguenza!!!

No era la primera vez que íbamos,por eso escogimos el hotel cuando llegamos no había nadie en la recepción,cuando subimos a la habitación estaba tremendamente sucia ,vieja y descuidada ,le dimos un pase y fuimos a cenar ,aquí es donde chicote se lo habria pasado bomba ,tres camareras discutiendo ,todo sucio y desordenado y al bajar al servicio vimos la cocina inferior,que lo único que puedo decir es que sanidad la cerraría ya!!no se lo recomiendo a nadie ,ah por cierto el aire acondicinadl funcionaba mal ,desprendía polvo,y olor a mugre

El hostal está muy bien, limpio, calentito y muy bien ubicado. Lo único negativo que puedo decir es que se escucha y oye todo. Tiene dos edificios. Yo estuve ubicada en el edificio del restaurante. El restaurante espectacular, la comida y la cena riquísima y la atención de las camareras muy buena.

El hostal está en el centro de León que para visitarlo está genial situado. Está bien de precio pero creo que sí que algunas cosas antiguas y un pelín más en la atención de la limpieza (no digo que estuviera sucio) pues estaría mejor. Para aparcar, hay parkings públicos relativamente cerca.

Comer en pleno casco histórico de León es un privilegio para aprovechar. Aparte de la cecina y demás embutidos, destaca un rico foie de pato que sacia tu necesidad casi al momento de acabarlo. El precio y la calidad son acordes al lugar. La plaza de San Isidoro es un ingrediente más del menú.