Le Château d'Apigné

Mi experiencia en este hotel fue, en general, positiva, aunque la habitación no cumplieron con nuestras expectativas. Lo primero que debo destacar es que el lugar es absolutamente encantador. Se trata de un antiguo castillo francés, precioso, con todo el encanto que uno espera de un sitio así. Los alrededores también son fantásticos, llenos de paisajes hermosos que invitan a pasear y relajarse. Sin embargo, lo que nos decepcionó fue la habitación. Cuando reservamos, esperábamos algo más acorde con el ambiente mágico del castillo. he de puntualizar que estábamos alojados en un pabellón externo, no dentro del propio castillo por lo que no puedo opinar de las habitaciones dentro del mismo. La habitación, aunque correcta, no estuvo a la altura de lo que imaginábamos al ver el resto de la propiedad. Nos hubiera gustado tener una experiencia más acorde al lugar, algo más especial. Por otro lado, el resto de los servicios estuvieron bien. El desayuno fue completo, con una buena variedad de opciones, y el comedor tenía un servicio excelente. El personal fue muy amable y servicial en todo momento, lo cual es siempre un gran plus. En resumen, el lugar es hermoso y tiene un gran potencial, pero si volvemos, sin duda intentaremos alojarnos dentro del castillo para vivir la experiencia completa. Esperábamos otra cosa en cuanto a la habitación, pero lo demás estuvo muy bien.

Hotel en típico chateau francés, en el que se ha conseguido una restauración impecable. Decoración original con muebles de época incluso en las habitaciones. Servicio exquisito. Hay que aceptar que las habitaciones mejores no tienen aire acondicionado ni nevera, aunque por la estructura del hotel, se comprende. Jardines cuidados. El restaurante del hotel también vale mucho la pena. Altamente recomendable.