Usuario invitado
16 de junio de 2023
Lo mejor del hostel es el desayuno que es muy variado. Por otro lado, la vista al mar de la habitación doble en el último piso también está muy buena. La habitación es bastante grande mientras que el baño es pequeño. El lavatorio es muy pequeño, tanto que la canilla está puesta a un costado y casi no hay donde apoyar un cepillo de dientes o un peine o crema. Al usar la ducha, no hay manera de qe el baño no se inunde dado que no hay ninguna barrera para frenar el agua; solo hay una mampara muy pequeña que no alcanza. Por otro lado, la canilla es de esas que se presionan y luego de unos segundos se corta el agua, como las que se usan para lavarse las manos. Entiendo y comparto 100% la necesidad que hay de usar racionalmente el agua. Sin embargo, es realmente una locura poner estas canillas en una ducha! Te morís de frío al bañarte. Por otro lado, no nos dieron jabón para lavarnos las manos (solo shampoo). Realmente no sé si volvería. El staff fue amable, pero es una locura el sistema de la ducha de la habitación doble.