Usuario invitado
16 de enero de 2025
Un familiar nos recomendó este hotel. Excelente relación calidad-precio y ubicación inmejorable. Sin embargo, nuestra habitación al llegar era bastante grande, lo cual al principio fue estupendo. Sin embargo, como nos levantamos muy temprano para nuestro vuelo, pensamos echarnos una siesta antes de salir a cenar por la noche... no fue buena idea, ya que nuestra habitación daba a una preciosa iglesia. Suena bien, pero desde luego no lo era cuando las campanas de la iglesia suenan cada hora y luego siguen, sino con una melodía exasperante tras cada campanada. No pudimos pegar ojo esa primera tarde o noche, y todo vuelve a empezar a una hora ridícula por la mañana. ¡Menudo descanso relajante!
Después de pasar por recepción al día siguiente, por suerte nos trasladaron a otra habitación con vistas al patio. Unas vistas deprimentes, pero muy tranquilas, lo cual fue genial.
Recomendaría este hotel, por su excelente ubicación y por su fácil acceso a pie a todas las zonas, pero solo si la habitación no estuviera cerca del ruido de la iglesia. 🥹
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