Usuario invitado
8 de octubre de 2024
El hotel está un poco alejado, pero es tranquilo y silencioso, con poca gente y un paisaje agradable.
El desayuno es bastante satisfactorio, el sabor no es malo pero tampoco sorprendente.
La ecología es demasiado buena. Encontré un gecko en el baño el primer día. Lo saqué rápidamente y nunca regresé. Al vivir en una villa con jardín, inevitablemente hay dos mosquitos en la casa. Afortunadamente, preparé un medicamento, los rocié una vez y dejaron de aparecer.
En general, la experiencia es buena y la relación precio/rendimiento es bastante satisfactoria.
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