Usuario invitado
23 de agosto de 2023
Estuvimos hace poco y nos decepcionó mucho. Teníamos dos habitaciones, una de elles con cama supletoria. Lleguemos al hotel a las once de la noche y esta cama supletoria no estaba en buenas condiciones, así como su colchón. Por otro lado, el váter estaba atascado y no teníamos toallas. A todo esto, nos quejamos y tardaron dos horas en resolverlo (con una cama más grande que el colchón y este que se hundía por todas partes). Al día siguiente, fuimos a pedir el cambio de colchón y toallas, a lo que tuvimos que esperar casi un dia y muchas veces insistiendo para el cambio (con respuesta de “ahora vienen” que nunca llegaba.) Por otro lado, las sillas del comedor daban pena de lo sucias que estaban (que si tomate, que si pies marcados, etc.) las servilletas estaban agujereadas y el mantel, también estaba penoso. De la misma manera, las toallas de las habitaciones y las sábanas estaban manchadas, las almohades hacían olor a humedad... El gerente, muy mentiroso y despreocupado, dando largas en todo momento haciendo que nos sintiéramos dejados. Esto no es un buen trato para los huéspedes si de verdad te importan. En conclusión, aunque el lugar es muy bonito, esto te impide disfrutar de la experiencia como es debido. Este hotel aún NO está preparado para recibir turismo.