Cabañas Oma Lissi

No lo recomiendo. Si bien el complejo es muy lindo, está totalmente descuidado..pastos largos y yuyos que salen del piso alrededor de la pileta. Encontramos 2 alacranes en el baño apenas entramos, no había papel higiénico ni fósforos. Se notaba que hacía tiempo no se barría. La parrilla tenía cenizas viejas.

Estuve hospedandome este verano junto a mi pareja y a mi dos perros. El lugar tiene cosas positivas y algunas negativas que creo que con un poco de maña y voluntad se puede mejorar. Para empezar es bueno que acepten mascotas, a quienes amamos los animales nos permite llevarlos y estar tranquilos, creo que eso es un punto a favor, el dueño solo pide controlarlos y que no molesten a otros huéspedes. El paisaje es bello por donde se lo mire, las cabañas están bien ubicadas, la nuestra tenia una ventana en la habitación en planta alta que daba a la montaña, era mágico despertarse y ver ese hermosura. En cuanto a la limpieza, las encontré la cabaña limpia, ordenada, incluso tienen un servicio de limpieza sin costo algunos tres veces por semana. Los utensilios de cocina eran pocos pero los necesarios para cocinar lo básico. La parrilla estaba completa y el alguna, aire acondicionado, gas funcionaba bien. Ahora, puntos a considerar, no proporcionan wi fi, lo cual si haces home office y queres trabajar unos días en otro lugar que no sea tu casa, no lo podes hacer, quedas totalmente aislado porque incluso la señal de celular es muy poca, nosotros no teníamos ninguna señal, cuando pregunte la contraseña me dijo que no lo ofrecían porque la señal era mala, creo yo que se puede ofrecer igual y anunciar "les aviso por las dudas que en esta zona es posible que la señal no sea muy buena" pero de esa manera el huésped queda conforme que al menos existe el servicio o la voluntad de proporcionarlo. Otro lado es el desayuno, al ser muy viajeros nos hemos quedado en muchísimos hospedajes, este es el primero que no me ofrece ni siquiera un desayuno seco, digo, que costoso o difícil puede ser acercar una bandeja con algunos saquitos de te, café y azúcar y algunos paquetes cerrados de galletitas o magdalenas...¿cual puede ser el costo en una cabaña que te cobran 7000 por día?, en ese punto creo yo que la palabra es despreocupación, como viajera que soy siempre agradezco cualquier detalle, aunque sea mínimo, siempre es bien recibido ya que uno se siente bien y valorado como huésped. La pileta, durante los días que yo estuve, estuvo bien, lo único para comentar es que el mantenimiento lo hacia muy tarde, pasada la media mañana, por lo tanto, si querías nadar o aprovechar los primeros rayos de sol encontrabas la pileta un poco sucia, creo que eso se mejora limpiándola temprano. Destaco la buena onda que tuvo con nosotros y que, más alla de todo, es un espacio sin ruidos, super tranquilo para descansar, dormir y comerte un asadito.