Casa na Praia Jeri

El Hotel es malísimo; chico, encerrado, no corre el aire, la pileta está en un lugar y las reposeras en otro, todas juntas como en un balneario municipal; nadie usa la piletita. Es muy pobre lo que ofrece, realmente no se corresponde con el precio que cobran. Para tener una idea: LA SUITE SUPERIOR DELUXE CON VISTA AL MAR (donde estuvimos) NO TIENE UN LUGAR PARA GUARDAR LA ROPA!!!! Tenés que dejar todo en la valija porque solamente te dan un apoya valijas. Hay unas perchas encima de la máquina de café y la heladera y arreglate. NI CAJONES NI ESTANTES. Pedimos algo para la ropa y nos dieron otro apoya valijas. Es más: un día nos anuncian que no vamos a poder usar las partes comunes del hotel desde la tarde porque iban a celebrar con los empleados. Eso duró hasta la medianoche; al otro día sucedía lo mismo, porque ALQUILARON EL HOTEL PARA UNA FIESTA PRIVADA; y al día siguiente, otra vez. Claramente no es el huésped a quien atienden. Y lo peor: la entrada es únicamente por la playa. Muy simpático. Pero la marea alta llega hasta arriba de las escaleras de entrada, y tenés que mojarte para entrar y salir, y si salís de noche a cenar no sabés si vas a poder entrar sin meter las piernas en el agua. Al volver tenés que entrar escondido por las propiedades linderas como delincuentes. Para llegar y salir hay que cargar las valijas en el hombro para no mojarlas (es en serio). Cuando la marea baja, delante del hotel (única entrada y salida) se forma un mercado con puestitos y reposeras PAGAS que NO son del hotel. Esa es la "vista al mar". Y cuando sube la marea todo se retira y queda la suciedad y los botes de los pescadores en la entrada. Terminamos yéndonos de ahí a pesar de tener pagados tres días más. Nos fuimos a otro muy cerca, sobre la playa, de verdadero nivel, extraordinario y que solo costaba 30 dólares más por noche. La diferencia fue abismal. Una pésima experiencia en Casa na Praia; no entiendo la calificación que tiene, hay algo muy raro ahí. Es horrible.