Usuario invitado
31 de enero de 2023
El hotel también es bonito, aunque un poco alejado del centro, excepto que: la piscina no es una piscina, ni siquiera hay cambio de agua, por lo que dentro todo flotaba, ni siquiera entramos. El desayuno es a las 8.30 y no se puede anticipar, tuvimos que salir a las 8, cero flexibilidad (me parece un poco tarde como horario) la nevera no funcionaba, las bicicletas estaban todas rotas (seis) y finalmente el dueño está siempre apático, cualquier pregunta era una molestia y lo alejaba de la tele…
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