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13 de septiembre de 2023
El hotel está muy bien ubicado. A un par de minutos de la parada del tranvía. Todas las atracciones están a poca distancia. El hotel dispone de ascensor. Los desayunos eran muy decentes: sandías, ciruelas, albaricoques, huevos, patatas, huevos revueltos, panes planos, bollería variada, mermeladas, tomates, pepinos, quesos, varios snacks de verduras fritas, té, café, leche. Un desayuno bastante sabroso. La habitación era muy vieja. Pero, en lo que a mí respecta, 4.400 rublos, teniendo en cuenta la ubicación, son suficientes para una o dos noches. Hay zapatillas. Toallas. Gel, champú y acondicionador para el cabello. El wifi es muy malo, casi inexistente y seguía interrumpiéndose. La ropa de cama está limpia. Sólo hay un enchufe cerca de la cama, lo cual no es conveniente. La habitación tiene aire acondicionado. Y también es muy extraño, pero en el hotel han robado cubiertos de la aerolínea Aeroflot, que reparten a bordo para comer.
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