Great Fortune Hotel & Spa

Llegamos al hotel antes del check in, nos recogieron las maletas y fuimos a hacer turismo. Cuando volvimos nos llevaron a unas habitaciones en un sótano, sin ventanas. A medida que bajabas en el ascensor te venía un olor terrible a humedad y cañerías. Una de las habitaciones tenía la cama a medio hacer, las dos mobiliario viejo y roto. Olor indescriptible. Volvimos a la recepción y le enseñamos la reserva a través de trip que mostraba la reserva de dos habitaciones estándar con vistas a la ciudad. El recepcionista nos dijo que nuestra reserva eran de dos habitaciones económicas sin ventanas (desconocía que en un hotel de 4 estrellas te pudiesen meter en una habitación sin ventana), pero rápidamente ofreció una habitación mejor por 15 euros más por noche y habitación (60 euros en total). Llamé a atención al cliente de trip. Me atendió Alejandra que me calmó y se puso en contacto con ellos. (Muchísimas gracias Alejandra).El problema al parecer surgió por culpa de un intermediario con el que trabaja Trip. Mientras yo intentaba solucionar el problema por teléfono, al resto de mis acompañantes le insistían para venderle cruceros, cenas y traslados al aeropuerto (parecíamos los protagonistas de un chiste malo). Nos enseñaron las otras habitaciones, que estaban en un hotel diferente. Llegar al otro hotel fue otra aventura. Nos guió un botones (un chico jovencito encantador, lo único salvable del hotel) por en medio de unas calles llenas de obras. Accedimos a alojarnos en las habitaciones que nos ofrecieron, adelantamos el pago de 60 y trip prometió su reembolso (en dos dias teníamos el reembolso en nuestra cuenta). El desayuno del great fortune desing, donde al final dormimos, fue inexistente, ya que ni siquiera les funcionaba las máquinas de café y la solución que nos daban eran unos sobres de café soluble, al rellenar la taza con agua caliente se rellenó también de partículas negras, ahí decidimos que desatunaríamos fuera. No voy a mencionar el resto del desayuno. Desayunamos fuera, con los gastos que eso conlleva. El hotel en el que al final nos alojamos carecía de servicios contratados en el primer hotel (piscina climatizada y desayuno en terraza con vistas) además de que estaba peor ubicado, en unas calles llenas de obras por el día y desérticas por la noche. Pensar muy bien si queréis reservar en este hotel, puede que tu estancia sea en un sótano insalubre con olor a cañerías.