Usuario invitado
14 de agosto de 2022
Lamentable. Desagradable. Falta de empatía e incumplimiento de la reserva. Era cliente hasta este verano. Reservamos una habitación familiar en Booking hace cuatro meses, con dos estancias, una con cama de matrimonio y otra con tres camas, con balcón y vista al mar, que es la habitación 401 que ofrece el anuncio y que habíamos estado varios años antes. Al llegar al hotel nos dan la habitación 301, con una estancia con cama de matrimonio y una supletoria, y otra estancia con dos camas, con una ventana a 1,55 cms de altura del suelo con vistas al tejado y si eres alto con vista al mar de oblicuo... Bajamos a recepción y pedimos que nos den la habitación que habíamos contratado, y que no es otra que la que sale en el anuncio. No salen más. No hay opción de equivoco. La recepcionista, que en otras ocasiones parecía amable se empecinó en contestar que esa era la habitación que habíamos reservado, y que la 401 estaba ocupada. Tras varios intentos de convencer que no era la que había publicitado en Booking, no ofreció dos habitaciones separadas y con un incremento de 180 euros. Le dijimos que de ninguna manera íbamos a asumir más coste, que en todo caso tendría que ofrecernos al mismo coste e incluso pedirle indemnización por incumplimiento del contrato... Llamamos a Booking en tres ocasiones, más de 70 minutos de llamadas, desde las 12:00 hasta las 16:30, con tres agentes diferentes, los cuales nos repondían que iban a hablar con el hotel para dar una solución. La "no empática" de la conserje les confirmaba que la habitación ofrecida era del mismo tipo que la ofertada, una habitación familiar...pero sin el detalle de las camas en las diferentes estancias y el balcón con vistas al mar...y que las fotos no correspondían al anuncio. Así que solicitamos la cancelación de la reserva, tras otras 2 llamadas de 30 minutos. Los dos primeros agentes de Booking aunque nos daban la razón, no cancelaban la reserva y tras muchos argumentos conseguimos que el tercero reconociese nuestro derecho y cancelara la reserva y la devolución del dinero. Se hicieron las seis de la tarde, con tres hijos y las maletas en la puerta del hotel. Nos marchamos no sin antes pedir la devolución de la tasa de turismo, seis euros. La conserje de la tarde era todo lo contrario, empática y más resuelta, pero habíamos llegado al límite. No se puede tratar así a un cliente, que llega con toda la ilusión a pasar una semana de vacaciones en familia y se encuentra con una situación tan desagradable. Buscamos otro hotel por la zona y como las cosas suceden por causalidad, encontramos un hotelito perfecto, con inmejorables vistas al mar, estancia para familia completa y un restaurante increíble de calidad y precio. Una recepcionista amable, simpática, todo lo contrario a la del hotel Vista Mar. Haré la valoración en su propia web, aquí no merece la pena mezclarlo con este desagradable comportamiento de una empleada que debe velar por la atención al cliente y la reputación de su hotel. Y ante tod