Usuario invitado
29 de abril de 2024
El peor alojamiento en 25 años de viaje. La habitación definida como "Deluxe king" apenas tiene espacio para un par de camas individuales, el baño apenas tiene capacidad para una persona y, al estar hecho en su mayor parte de plástico, se parece mucho a un baño químico. No hay armario, nunca vinieron a limpiar la habitación y cambiar las toallas, las almohadas tienen una forma cuadrada sin sentido, huelen mal, hay polvo por todos lados y telarañas y arañas. Por la noche es imposible dormir bien: niños jugando al fútbol en los pasillos, chicos borrachos golpeando las puertas, gritando y maníacos corriendo de un lado a otro haciendo retumbar y temblar los paneles de plástico que componen en gran parte la habitación. Todo en la indiferencia del personal "muy eficiente" presente las 24 horas del día. Alguien podría objetar "¡pero pagaste poco!".... 600 euros por 4 noches. La única nota positiva, que es la ubicación junto a la estación central, queda anulada por el riesgo de ser asaltado o apuñalado por uno de los numerosos malhechores acampados cerca de la entrada del hotel. PARA EVITAR COMO LA PESTE.
Texto originalTraducción facilitada por Google