Pascual S
7 de diciembre de 2023
Pese a que el hotel estaba medio vacío, nos situaron en una habitación que daba para una zona de descampado en donde había altisimos ruidos de música y ajetreo hasta las 5-6 madrugada, (zona de botellón del pueblo) de lo cual seguro que son conocedores los propietarios cada sábado, apenas pudimos dormir. Las camas muy incómodas de muelles, inaudito en pleno 2023, las almohadas durísimas, la comida del restaurante más dura y rancia imposible. Yo trabajo en un Hotel en Aguadulce y es la primera vez en mi vida que pongo una reseña mala a otro alojamiento, pero nos fuimos muy pero que muy disgustados mi padre y yo.