Usuario invitado
21 de enero de 2025
Lamentablemente, mi experiencia reciente con el Parador de Guadalupe ha sido decepcionante debido al trato recibido por Isabel en recepción, quien mostró una actitud muy poco profesional, comprensiva y amable. Tuve un problema con una reserva que realicé con meses de antelación y de la que no recordaba haber hecho. No recibí ningún correo recordatorio por parte del Parador, ni tampoco una llamada al no presentarme el día de la estancia. Al día siguiente, me encontré con un cargo de 111 euros en mi tarjeta sin haber hecho check-in. Inicialmente pensé que se trataba de un uso indebido de mi tarjeta y contacté con mi banco. Fue entonces cuando descubrí que el cargo provenía del Parador. Cuando llamé por primera vez, la persona que me atendió fue amable y me pidió que enviara un correo explicando la situación. Sin embargo, pasaron casi tres semanas sin recibir respuesta. Tuve que enviar un segundo correo, y la respuesta fue simplemente citar la política de cancelación sin mostrar empatía ni ofrecer solución alguna. Finalmente, decidí llamar directamente y, lamentablemente, me atendió Isabel, quien fue extremadamente desagradable, cortante y poco comprensiva. Me interrumpió constantemente, se limitó a repetir que la política de cancelación era inamovible, y concluyó la conversación con un tono despectivo que dejó claro que no le interesaba mi problema. Entiendo que a veces hay poco margen de maniobra frente a políticas establecidas, pero una simple llamada o un correo con un tono más comprensivo habría marcado la diferencia. Un gesto amable, como explicar que aunque no podían hacer más, entendían mi frustración, habría sido suficiente. Sin embargo, el trato recibido fue muy frío y distante, y eso es algo que considero inaceptable en un lugar con la reputación de los Paradores. El Parador es un lugar maravilloso, pero el trato al cliente es fundamental, y desafortunadamente, la actitud de Isabel no está a la altura de lo que uno espera en un sitio así. Recomendaría reconsiderar su elección si valoran el trato humano en su experiencia de hospedaje.