Hotel Demetria

Para hacer check out te hacen esperar a que una persona vaya a revisar el cuarto y mande fotografías a recepción. En mi caso manche la toalla de la cara con protector solar, (por supuesto no fue intencional) y no me dejaron salir hasta que pagué la toalla. Me cobraron $80 pesos y se me hizo una estupidez, ya que me dijeron que se te cobra si las manchas🤦‍♀️ Los hoteles deben tener cloro y químicos para tener una higiene impecable en toallas y sábanas; y eso debe limpiar cualquier mancha. Además sus cuartos están deteriorarlos y les hace falta mantenimiento Pésimas políticas y mal trato a sus huéspedes Fue la cuarta vez que me hospedé ahí y será la última Ojalá mejoren en todos los sentidos El joven de la recepción molesto por el incidente de la toalla 🙄 Además te obligan a dejar $3000 pesos por si haces algún daño al cuarto TODO PÉSIMO

En tantos años viajando nunca nos había pasado algo tan absurdo como en el Hotel Demetria. A la hora de salida me retienen aproximadamente 15 minutos, sin importar las prisas que se tengan. Argumentando que tienen que revisar el cuarto. Después de ese tiempo nos indican que hay una toalla manchada y que se deben $80, ya que era posible que no se quitara. En realidad era una pequeña mancha de protector de color que usa mi esposa. Si esas son sus políticas (nunca vistas en otro hotel) deberían informar a la hora del check in. Pedir a los clientes que no usen o manchen las toallas, porque de lo contrario te las cobran. Bien dice el dicho; qué difícil es ganar clientes, pero qué fácil es perderlos. Siempre llegamos a este hotel cuando visitamos Guadalajara, no volveremos. Nota: hay muchos productos químicos que quitan cualquier mancha, muy simple.

Mi experiencia para un evento con clientes en uno de los salones que tienen. El desayuno fue bastante bueno, el servicio es mejorable. La ubicación de este hotel es inmejorable aún y cuando no se encuentra en la zona de negocios. Los precios para quienes están buscando hacer presentaciones o reuniones son muy pero muy accesibles. La decoración y atmósfera del lugar es exquisita. Recomiendo sin duda a Hotel Demetria.

Asistí con mi familia para hacer el trámite de la visa, mi esposa, suegra y mis dos bebes de 7 meses, llegamos ya tarde al rededor de las 8:30 PM. Para empezar nos cobraron por dos habitaciones una tafira superior a la marcada en su propia página y en cualquier otra sitio de reservaciones, por lo tarde que era decidimos aceptarlo. Nos asignaron las habitaciones 208 y 210, una vez instalados mientras hacíamos el cambio de los bebes y al intentar lavar algunos utensilios de ellos nos percatamos que el agua en la habitación 210 salia color marrón del grifo del lavamanos, revise el tanque del wc y estaba completamente sucia el agua como se ve en la foto, el tanque parecía ya encamado con esa especie de óxido por lo que no parece que sea una cuestión esporádica sino algo que lleva ya un tiempo. Fuimos a la habitación 208 para hacer el lavado pero el agua que salía era exactamente la misma y al quitar el aireador del grifo vi que tenía hasta pequeños insectos, luego baje al lobby y el sanitario está en las mismas condiciones, quizá no es tan perceptible ya que la calidad de la luz es muy pobre y llega a disfrazar un poco el color del agua. Adicional a esto la habitación tenia partes muy sucias con una cantidad de polvo como si no se hubiese limpiado en mucho mucho tiempo. Decidimos entonces dejar el hotel ya que no estaba dispuesto a exponerme a esa agua tan sucia y mucho menos a mis bebés. Al hablar con la persona a cargo de nombre Cástulo Chávez para exponerle y problema y solicitarle la devolución me dijo que si quería me podía ir pero que el no podía autorizar ninguna devolución a pesar de que se identifico como el gerente en turno, solicitó los datos de la cuenta para hacerla al día siguiente y dijo que a las 9 de la mañana habría una persona que podría resolver el asunto. Al día siguiente que volví para arreglar el tema de la devolución me atendió el sr. Ricardo Bullnes quien me aseguro que el era el gerente del hotel, pero que no era posible cancelar los vouchers o hacer una devolución, la única opción que me dio fue darme cortesías por las dos habitaciones para que yo se las vendiera a otra persona que fuera a hospedarse ahí. La verdad me parece una injusticia que haya pagado 6,500 pesos por dos habitaciones y que en un hotel que presume ser de 5 estrellas ocurra una situación así.

Escogimos este hotel por estar cerca del lugar para sacar la visa, el hotel itiene una decoración muy original, sin embargo el cuarto 302 con el baño color ***** y el piso resbaladizo, la caja de seguridad en el piso y no servía! El desayuno muy malo, el baño de la recepción oscurísimo da miedo entrar, muy caro para lo que ofrece. En afán de ser moderno se afectó la funcionalidad.

Terrible servicio, fuimos un grupo de amigos y con todos hubo un problema diferente, el señor Rigoberto Avila, que es el supervisor tuvo la peor actitud al resolver cualquier tipo de inconveniente, reserve un cuarto con cama King y me dieron una cama matrimonial, las cortinas no cerraban, no había teléfono en el cuarto, no había nadie con quien hablar ya que todos decían que eran nuevos, estuvimos 2 días de los cuales un día estuve peleando por arreglar problemas del cuarto, terrible experiencia, no lo recomiendo para nada

El Hotel tiene muchas deficiencias en todos los sentidos y lo peor es sobre la seguridad estuvimos a punto de ser cautivos de un problema con sus adornos que cayeron y no se hicieron responsables. Es de dar pena tanta falta de responsabilidad

Pésimo servicio y cálida en atención al cliente, no volvería jamás ! Esperaba más por el prestigio que se dice tener este lugar pero lastima que no tienen hospitalidad. Nos hicieron pasar un momento incómodo restringiendo todo tipo de atención.

Al entrar notamos el hotel algo descuidado, lo dejamos pasar quizás por ser un hotel Boutique. A pesar de haber advertido nuestra llegada temprana, la habitación tardó un buen rato en estar lista. La alberca estaba helada a pesar de que la recepcionista nos mencionó que estaba climatizada. Al llegar a la habitación notamos un fuerte olor a pintura. Después de un rato el tan solo respirar provocaba dolor en las fosas nasales. Encima de eso, nuestras cosas (que se supone ya estaban en la habitación), no estaban. Inmediatamente, nos dirigimos a la recepción, donde la recepcionista nos tiró de locos ante el comentario del olor a pintura y de la desconocida ubicación de nuestro equipaje (la cual se tardaron 15 minutos en localizar y resultó que la habían puesto en otra habitación). Decidimos cambiarnos de hotel. Es increíble que un hotel de alto calibre le quiera ver la cara de tal manera al huésped. No se lo recomendaríamos a nadie.