Poznaniak
3 de abril de 2025
El hotel está casi al final de la costa, pero tiene sus ventajas: cerca de playas salvajes, más tráfico para caminar hasta el centro y mayor tranquilidad en la zona.
El hotel estaba muy limpio, notamos cómo las señoras incluso limpiaban el interior del armario de la habitación.
Yo reemplazaría las colchas.
Hermosa vista al mar desde el balcón (eso era lo que teníamos)
habitación reservada).
Lamentablemente la mayor decepción es el desayuno. Cero verduras, siempre el mismo plato, huevos revueltos secos, salchichas. Todavía los mismos pasteles dulces. Al tercer día ya estábamos hartos.
Para cenar también platos limitados, satisfechos un 60%... pero nada espectacular tampoco. Las bebidas están disponibles a un coste adicional.
En general volvería al hotel, pero sin comidas.
Texto originalTraducción facilitada por Google