Usuario invitado
18 de julio de 2024
Este hotel se encuentra bien ubicado, ya que está rodeado de lugares para comer, al lado de Pizza Hut, en la esquina se encuentra un McDonald's, Subway a unas cuadras y muchos lugares más. Se encuentra frente a la playa, justo enfrente de la feria de artesanos, por lo que hay opciones de paseos durante la tarde y noche. La pileta es agradable, se encuentra en el primer piso y, si bien se ve la playa desde un costado, al tener una baranda vidriada, la gente que camina por la calle del costado puede ver a la gente que está sentada junto a la pileta. Rodeando la pileta hay sectores de mesas sillas y camastros, con un techo con madera y tela que es muy agradable. Hay una barra, por lo que se puede tomar algo en el sector. En la recepción dan toallas para la pileta. El cuarto era grande y estaba bien, pero tal vez podrían prestar un poco más de atención a los detalles, como por ejemplo la tapa del enchufe o el gancho de la toalla del baño que estaban torcidos. No había mucho decoración, solamente un cuadro en la pared de la cabecera de la cama. En la televisión todos los canales eran en portugués y no se veía muy bien, por momentos se veía como con lluvia. La conexión wifi no es muy buena, se cortaba bastante y no funcionaba por momentos. El desayuno estaba bien, con opciones de ricos panes, yogur, cereales y tortas. Había un sector de cosas saludables. En la recepción y restaurant el aire estaba bastante alto y hacía un poco de frío, por lo que se siente bastante la diferencia de temperatura al entrar al hotel. En la puerta del hotel paran taxis, por lo que es cómodo.