Usuario invitado
13 de enero de 2022
El resort está situado en un isla realmente paradisíaca con vegetación exuberante y espectaculares playas con aguas cristalinas y cálidas, y donde siempre se respira un ambiente muy tranquilo. Estuvimos siete noches, con entrada el 31 de diciembre. La comida bufet, buena y abundante, con especial mención a la repostería, por su calidad y variedad. La cena de Nochevieja fue del todo correcta. Todo el personal es servicial. Recomiendo el régimen de "Todo Incluido" para evitar sustos, ya que el precio de las consumiciones es elevado. La excursión a la comunidad local estaba suspendida por el COVID y se sustituyó por un safari snorkel, llevándonos en barca a un arrecife vecino a unos 30 minutos de navegación y finalmente a un espectacular banco de arena. La pesca al atardecer también resultó entretenida, la tripulación te coloca los cebos y te ayuda a quitar el pescado; resulta muy agradable pescar bajo las estrellas!. También tuvimos un relajante masaje de 30 minutos en el Spa del resort. DEFICIENCIAS: El resort necesita alguna renovación, pero, todavía, mantiene su encanto. Que el wifi sea de pago y caro (más de 100 euros, una semana) y con cobertura limitada a las zonas comunes del resort es un atraso, nosotros compramos tarjetas e-sim, mucho mas baratas y con cobertura en toda la isla. En el resort, durante la semana que estuvimos, solo se hablaba inglés, parecería necesario algun personal plurilingüe. En resumen, un lugar ideal para relajarse y adonde apetece volver.