Usuario invitado
8 de junio de 2025
Nuestra llegada al hotel no comenzó con la mejor impresión. Al realizar el check-in, la habitación aún no estaba lista y las indicaciones que habíamos proporcionado en el cuestionario previo parecían haber pasado desapercibidas. Sin embargo, ese pequeño inconveniente quedó rápidamente en el olvido gracias a la excepcional atención que recibimos a lo largo de nuestra estancia. Desde el primer momento, Brenda, la maravillosa anfitriona de la piscina, tomó las riendas de la situación y transformó nuestra experiencia en algo verdaderamente extraordinario. El hotel, una joya arquitectónica, deslumbra con sus impecables instalaciones: piscinas de ensueño, un spa de primer nivel, restaurantes exquisitos y un diseño que combina elegancia y calidad en cada rincón. Pero lo que realmente distingue al Villa Le Blanc como un destino de gran lujo y exclusividad es su excepcional trato humano. Desde el subdirector del hotel Pedro, con quien tuvimos la oportunidad de compartir una enriquecedora conversación sobre la experiencia desde la perspectiva de los huéspedes, hasta cada miembro del equipo que nos atendió con dedicación y profesionalismo. Queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a los talentosos chefs que nos deleitaron con su arte culinario, así como a los magníficos waiters David, Rubén y Luigi, cuya atención impecable hizo de cada comida un momento especial. También extendemos nuestra gratitud al equipo de housekeeping, que mantuvo nuestra habitacion, impecable y atendió cada una de nuestras necesidades con esmero. También muchas gracias al equipo de Valet parking y gracias por poder usar el Audi Q8 electric que fue todo un lujo. Por último, pero no menos importante, queremos reconocer a Carmen y al equipo de Guest Experience, quienes hicieron todo lo posible para acomodar nuestras peticiones y brindarnos una estancia que superó todas nuestras expectativas. Han sido días inolvidables, y no podemos más que agradecer a todo el equipo del Villa Le Blanc por hacer de nuestra visita una experiencia verdaderamente excepcional.