Usuario invitado
31 de enero de 2023
El desproposito de apartamentos en época de covid. La tele no funciona (yo en 2022 ya leo los mismos defectos escritos años antes por otros viajeros) El wifi es malo y se interrumpe. Los teléfonos no lo detectan, va y viene. La ropa de cama y las toallas (dos de ducha y una de manos para dos, algo escaso) te las entregan en una bolsa cerrada. En las camas hay edredones ya colocados que se entiende no han ido a la lavandería dado que no te los entregan en bolsa cerrada, es decir los edredones (funda mas edredón) parece no se cambian al cambiar de viajero. Encima bajo la cama va y aparece un calcetín de un pasado visitante. Las sabanas bajeras son justas, no son ajustables así que se salen continuamente. Del mobiliario no hablemos. La mesa tiene las patas desvencijadas, alguna de las sillas de tijera se van de lado cuando te sientas, el mueble bajo el lavabo esta sucio de años (una cosa es que quien lo ocupa lo limpie otra es que el que lo reciba debe recibirlo limpio sin importar si el visitante anterior no le dedico el merecido cuidado). La cocina no se que decir pues no me he dedicado a cocinar y no le he prestado mucha atención pero a la nevera le faltan piezas (en la puerta por ejemplo). Por otra parte el espacio. Es un apartamento contratado para dos pero hemos de convivir con un sofa cama, vale, y una cama para una tercera persona, Curioso porque en recepción se dice a los viajeros que cada apartamento está preparado segun la reserva que se ha hecho y si alguien viene con tres personas pero la reserva es para dos no va a tener tres camas). El personal, el chico de recepción pues no se ve otro, encantador pero supongo echando balones fuera, no se preocupe en uno o dos días está soluciionandose, mañana viene el jefe, le voy a mirar a cambiar a otra habitación, que lastima esta el hotel completo.... De momento no recomendable, solo una pension con cama y no muy limpia. Tambien decir que la habitación apesta a tabaco.