Usuario invitado
16 de diciembre de 2022
La ubicación del hotel es excelente, tienes a 3 minutos la calle principal O'Connell street dónde encontrarás bastantes paradas de bus y tranvia. Para llegar a la zona conocida de "temple bar" solamente hace falta unos 12 minutos andando que se hacen agradables observando la ciudad. También, justamente debajo del mismo tienes dos supermercados, uno de ellos el conocido Lidl.
Por otro lado, la habitación es muy acogedora y bonita, con los últimos detalles tecnológicos y domótizada. La limpieza inmejorable, todo limpio, camas hechas al día siguiente con cambio de toallas incluidas.
El punto negativo, el almuerzo, aunque nosotros íbamos sabiendo lo que había por los comentarios leídos, aún así decidímos coger la opción de desayuno incluido para no perder tiempo en buscar sitios donde desayunar. Os explico! no había nada para hacerte un plato caliente (bacon, huevos fritos o estrellados, etc). Pero si para hacerte bocata de jamón, jamon dulce, queso, pollo. Y luego pasarte a lo dulce con la bollería (croissant normal y de chocolate, cañas de salchicha, cereales con leche, etc). Para las bebidas tienes opciones de zumo de naranja o cualquier tipo de cafe.
El hotel sería un 10/10 si mejoran el desayuno con la opción de tener platos calientes. Aún así, mi puntuación es de 9/10.
Hotel con encanto que si tuviese que recomendar a familiares o amigos sería la opción perfecta.
Gracias a Amy por su amabilidad a la hora de hacer el Check-in hablando en Español y dejarnos guardar las maletas a la hora de hacer el check-out.
Saludos desde Barcelona.