SONIA B
17 de agosto de 2024
Hotel increíble en primera línea de playa ,tres piscinas, una de ellas de agua salada,y una infantil, ,un restaurante con precios increíbles para el pescado,una dorada sabrosísima y un bogavante ambos al grill buenísimos ( curioso porque la comida no es barata pero el pescado en comparación con España es mucho más económico) y allí lo cocinan increíblemente bien. Camareros amables y rápidos. Maravillosa Georgia de recepción,te soluciona todo, pendiente de todos los huéspedes, es una profesional increíble y muy eficiente . Recomiendo coger habitación con vista al mar,os aseguro que merece la pena Ideal para familias con niños pequeños o preadolescentes, yo fui sola con mi hijo preadolescente y lo hemos pasado genial, además hay un"chiringuito" para hacer surf ,ski surf y más actividades Ideales para esa edad. En el hotel organizan excursiones, y además hay un bus municipal a 3 minutos que te deja en Corfú en la parte antigua ( hay que bajarse en la última parada y en 5 minutos estás). Hay una tienda dentro del hotel con precios asequible y el caballero que atiende es muy amable. Hamacas y sombrillas gratis para los huéspedes tanto en la playa privada, playa súper limpia, como en el hotel. Hay que llevar escarpines, prácticamente todas las playas son de piedra. Hay una especie de paseo marítimo, no como lo conocemos en España,muy muy estrechito con muchos restaurantes bares y tiendas y te puedes bañar por la noche en la playa. Y maravillosa también la jovencísima Rafaela que recogía y atendía en el desayuno y en la cena,atenta, amable, pendiente de los clientes, da gusto encontrarse con una sonrisa y esa dedicación, por la mañana y por la noche. El hotel está muy bien,pero también contribuyen a ello las profesionales y los profesionales que trabajan en él. Una experiencia maravillosa Lo recomendaré y repetiremos