Usuario invitado
18 de agosto de 2022
Paramos a la vuelta de una excursión. El personal nos informó antes, muy amablemente, y después fuimos a tomar algo antes de volver. El trato excepcional. El lugar es increíble: estilo Victoriano, envejecido pero limpísimo, súper agradable. Pedimos una pinta de cerveza y yo pedí un desayuno especial (café + scone con crema y mermelada) y nos costó más de 20€. Valió la pena porque el scone y la nata eran de otro mundo… Ni me imagino lo que son las habitaciones, por las fotos también espectaculares. Ahora bien, 300€ la noche. XD Ánimo. Y gracias al personal del hotel :)