luitours
19 de septiembre de 2024
Fue, sin lugar a dudas, el hotel que más nos sorprendió para bien en nuestro viaje a Turquía. Veníamos de Kas y la llegada es fácil. Lo elegimos por ubicación ya que está en la misma calle de los ferrys que pasan los coches para ver las ruinas romanas. Está a dos pasos del centro del pueblo, dónde se cogen las barcas para recorrer el río hasta la playa. A la vuelta, con las barcas, puedes pedir que te paren delante del hotel. Se puede aparcar en la calle sin problemas y el hotel es realmente bonito. Nuestra habitación daba a la planta baja y con acceso directo a la piscina, que está junto al río. Es una gozada de sitio. Muy buen bar de piscina y buen restaurante para comidas a precios más que razonables. Solo estuvimos una noche y nos encantó por lo que volveremos seguro. Las habitaciones, modernas, funcionales, con todo lo necesario. Buen baño reformado, amenities de calidad y gran desayuno. Y encima, justo enfrente del hotel hay un restaurante de pescado en la orilla del río que es espectacular y a un precio muy bueno. Lo tiene todo para pasar más de un día porque la zona también vale la pena.