Socialtel Cuenca

La experiencia en el hotel fue menor a la que esperaría después de ver tantas publicidades en redes sociales, la reseña va a ser larga. Mi primer problema ocurrió al hacer check-in, yo reservé una habitación con baño privado a través de Hopper (que es la página que uso para casi todos mis viajes y de la cual jamás he tenido ningún inconveniente). Cuando llego a recepción me indican que la que me corresponde es una de menor rango con baño compartido a lo que muestro mi reserva, y me dicen que lo que ellos recomiendan es no reservar en Hopper porque siempre hay inconvenientes y que mejor reserve por su página web, lo que me parece totalmente RIDÍCULO porque en cuyo caso deberían de retirar la posibilidad de hacer reservas por Hopper en lugar de decirle a alguien que YA RESERVÓ POR ALLÍ que mejor NO LO HAGA, y aún peor, me dicen que el valor que yo pagué no corresponde al del cuarto que yo quería aunque sea el que ellos fijaron en la página de Hopper. A este punto me encuentro bastante preocupada porque la reserva ya está pagada y no deseo tener que compartir baño y es tarde para ir a buscar otro hotel. La señorita después de mucho rato e indicarle mi malestar y que yo no he tenido inconveniente antes con la app, amablemente me indica que si tienen una habitación como la que yo reserve disponible por lo que básicamente “fue una suerte” obtener la habitación por la que pagué. Al llegar a la habitación lo que pude sentir al primer segundo fue que no tenía la limpieza que necesita. Yo soy alérgica al polvo y cada minuto que estuve en la habitación fue un martirio porque no dejaba de estornudar, el piso alfombrado se notaba que no había tenido una buena sacudida en mucho tiempo. Algo positivo a resaltar es que la cama era relativamente cómoda, habían varios conectores de luz y tenía un closet con perchas y un pequeño escritorio lo cual se agradece bastante, esos estaban en buenas condiciones. Respecto a las áreas comunes, en general la estética es bonita pero todo se siente ya bastante desgastado y descuidado, las mesas en las terrazas tienen la madera bastante desgastada, algunos asientos están ya flojos pero lo peor para mí fue la cocina, tenía un olor a humedad fuerte, trapos sucios y encimeras desgastadas, como si allí no hicieran limpieza a menudo, no quise estar mucho tiempo allí. Tampoco había ningún mini cine subterráneo como se muestra en sus redes sociales, solo una habitación con cosas regadas. Y finalmente el agua caliente, como leí en otro comentario hay que dejar la ducha abierta 15 mins para que llegue agua caliente, lo que es un enorme desperdicio de agua y me parece increíble que no busquen una pronta solución a eso. Los desayunos venían incluidos en el precio, el primer día tomamos los desayunos “Selina” que fue muy pobre a nuestro parecer, pero el segundo día se redimió con los de “Granola” y “Tigrillo” que estuvieron excelentes. El único punto positivo de la estadía es la ubicación, pues está a pasos de restaurantes, cafeterías

Era baño compartido pero no tenía ducha caliente, la habitación muy pequeña y si television, había ruido de música no se pudo descansar hasta las 3 am... Además la alfombra de la habitación estaba un asco demasiado sucia... Mi experiencia fue muy mala

Una casa antigua pero muy bien cuidada y con muchas actividades la atención increíble en especial Danna, las clases de yoga para iniciar el día: un acierto!! Lo súper recomiendo. Nosotros estuvimos en 3 ocasiones distintas y seguiremos repitiendo.. súper bien ubicado y tiene una Pitzzeria en la parte baja uffff

Selina tiene un concepto muy bonito, no solo para dormir, sino para disfrutar en todos los ambientes y estar conectado con la región. Me gustó el área de cine, ponen bonitas películas y tambien tienen bonitas pinturas en donde te puedes tomar fotos.