joibermen
29 de enero de 2025
Llegamos al hotel y la recepcionista apenas hablaba bien en español. Solicitamos cama de matrimonio y cuando llegamos a la habitación había 2 camas separadas. Reclamamos en la recepción y pensé que nos cambiarían de habitación. Cual fue mi sorpresa, que nos dijeron que nos llevaban la cama. Llegó el de mantenimiento a colocar bridas en las patas de la cama, y la chica de la limpieza trajo un sobre colchón. Nos quedamos perplejos. Pusieron como un topper encima de la cama y ya estaba lista la de matrimonio. He de decir, que no se durmió mal y era bastante cómodo. La cena era de 18.00-21.00. Muchos días llegamos a las 20.00 y nos comentaban que llegábamos tarde. La plancha tenía toda la comida recalentada y no preparaban más. Incluso no reponían la comida. Había que coger las sobras que quedaban. Y aún quedaba 1h para el cierre del comedor. Al final decidimos dejar de cenar en el hotel y cenar fuera, tranquilamente. En el comedor escasean las servilletas. Ponen 1 de papel y no más. En la mesa de al lado hubo un trozo de hortaliza que se estaba pudriendo por días. Es decir, no limpiaban el comedor. El personal del hotel (camareros, cocineros, recepción) estaban todo el día discutiendo. Un día hubo una pelea en la cocina que se escuchaba desde el comedor. Otro día fuimos a recepción y se oían gritos. Salió el chico de recepción con cara de mala leche y gritando y cuando nos vio cambió su cara e intentó ser amable. Otro que no hablaba bien español. Quisimos preguntar si nos podían poner el desayuno en una bolsa para el día siguiente ya que teníamos excursión. El chico todo borde nos dijo que no se podía por temas de sanidad. Le comenté que hay hoteles que preparan un piscolabis para esos casos. Todo borde nos respondió que no se podía y que si queríamos hablemos con el director. Menos mal que los camareros Jorge y Jenny nos explicaron como funcionaba: había que avisar en recepción a qué hora teníamos que desayunar ya que estaba abierto desde las 6 de la mañana. Es cierto que no hay mas que pan y poco más. Ni bollería. Pero al menos un café y una tostada se puede comer. La habitación era amplia, pero sin más. Para ser un 4 estrellas, deja mucho que desear. No funcionaba el aire, se paraba sólo. El baño estaba al fondo y no tenía extracción. Dispone del gel/champú en la ducha y jabón en el lavabo. Hay secador de pelo. Nos tocó habitación baja y tenía una terraza grande como para poder estar. La limpieza es correcta. La zona del hotel,…. Horrible! No hay nada alrededor. Hay que coger coche para desplazarse. Y si quieres ver sitios turísticos, la mayoría están a 1h o 1h 30m en coche Si no te quedas en el hotel, no merece la pena Dispone de piscina, tienda de recuerdos, billar,…. Y cruzando la carretera hay un super, pero nada más. El hotel está pensado para alemanes, de hecho creo que éramos los únicos españoles. Lo mejor del hotel son los camareros Jenny y Jorge, la chica canaria de recepción y la chica alta de la limpieza. Sin d