Tu alojamiento en Estocolmo

El ambiente del hotel es muy bueno y el desayuno tiene una variedad de opciones. No pude probar todos los artículos en dos días. La ubicación también es excelente. Básicamente puedes caminar a diferentes atracciones de la ciudad sin comprar una tarjeta de transporte. Primero compré una tarjeta de transporte de 72 horas, pero luego descubrí esto. Sugiero comprar solo una tarjeta de transporte de 24 horas, tomar un autobús urbano desde el aeropuerto y visitar todos los lugares pintorescos en los que quiero tomar el autobús. en un día puedes tomar el alranda express para el viaje de regreso, que es más caro, pero te llevará más rápido al aeropuerto. Este hotel también está cerca de una calle comercial. Si te aburres por la noche, puedes ir de compras.

La gran ventaja de este hotel es sin duda la ubicación, a 5 minutos a pie del metro y en un instante llega al centro. Sin embargo, en el nivel de confort no daría más de 3*. No tiene servicio de limpieza (es decir, tiene, una vez por semana see permanecer más de una semana) o sea, durante un estancia de una semana no hay intercambio de toallas. No ofrecen coches de habitación, no es muy práctico sobre todo en época de nieve que es inconcebible andar a apagar el suelo entero. Y para mí y sin duda lo peor, la maldita app para abrir la puerta de la habitación! Por favor, cambien de app!!! ¡Todos se quejan de lo mismo! Felizmente la chica de la recepción fue muy amable.

Punto de encuentro de la gente joven que ocupa por las noches el bar que está contiguo a la recepción. La primera impresión es que se trata de un albergue. Pero esta idea se va de la cabeza cuando accedes a las habitaciones. No son muy amplias, pero si muy bien distribuidas y funcionales. Limpias, claras y con una recepción de wifi gratuita, excepcional. El baño es suficiente y provisto de una fantástica ducha. El desayuno, se sirve en formato bufé en la planta 13 del edificio, con unas magníficas vistas sobre el centro de la ciudad. El bufé es muy variado y muy bien mantenido, impecablemente mantenido. La ubicación del hotel es perfecta en la parte tranquila del centro, muy cerca de la estación central y de la parte antigua de ciudad.

Consatisfactorio, la habitación es más pequeña, permite que los niños se queden con ella, el desayuno es bueno, la ubicación es muy buena y es el centro de la ciudad.

El hotel de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la ciudad de la La habitación (en el patio) era muy espaciosa, pero el baño estaba confundido, por decirlo menos, con un asiento de baño casi situado al lado del lavabo. Wifi estaba bien y el desayuno fue razonablemente bueno, pero el efecto general de tener que hacer repetidas solicitudes para limpiar la habitación (simplemente hacer las camas y cambiar las toallas más que la vez que finalmente se alcanzó durante un estadía de 5 noches es No es demasiado para pedir). Alguna recompensa fue solicitada y concedida y fue apreciada, pero desgraciadamente no se quedaría aquí otra vez.

Hotel de 4 estrellas situado en la isla de Sodermalm en Estocolmo, a solo 4 paradas de metro de la estación central de tren T-Centralem (desde donde hay conexión directa con el aeropuerto de Arlana) y a 2 de Gamla Stan (el centro de la ciudad, donde se ubica el museo de los premio Nobel, el Palacio Real o el Parlamento). A 5 minutos andando hay varios supermercados (Coop, Ica o Hemkop) y una gran variedad de restaurantes. Además en verano hay un paseo al sur junto al puerto deportivo donde poder practicar deportes, dar un paseo o tomar algo en los chiringuitos. Las habitaciones dobles están muy bien aprovechadas (las individuales parecen claustrofobias según las fotos), cuentan con todo lo necesario para un viaje de turismo o de trabajo. En ellas se puede encontrar minibar, televisión (no smart TV), plancha y tabla de planchar, escritorio con lampara, sofá y un baño completo (el agua caliente sale casi al instante). La conexión WiFi llega sin problemas a todo el recinto del hotel y con una velocidad elevada. Las cortinas cubren bien las ventanas (sobre todo para el verano cuando hay luz de 3-4 am a 10 pm). El hotel cuenta con salas de reuniones para conferencias (totalmente equipadas con proyectores, pizarras...), organizar reuniones , auditorio, gimnasio (incluido en el precio de la habitación), spa, bar, restaurante y un restaurante temático en la entrada. Para desayunar se dispone de un bufete con toda clase de productos, bollería, tortitas, huevos, bacon, salchichas, diferentes tipos de yogures con complementos, frutos secos, embutido, café recién molido, zumo natural, infusiones y fruta. Los fines de semana hay que reservar hora mediante una página web. El precio es bastante comedido teniendo en cuenta que se sitúa en un país caro como Suecia. En resumen la estancia fue muy agradable sobre todo porque el tiempo acompañó para visitar la ciudad (en julio). El personal fue muy amable y dispuesto a ayudar en todo lo posible.

Hemos pasado la noche del sabado 30 de septiembre. Excelente hotel. Gracias a Stina por el buen trato recibido en recpeción y por el upgrade. Muchas gracias a Hugo por sus consejos sobre la ciudad y por la vuelta en el buggie. Hotel clásico y perfectamente conservado. Situación buenisima y gran servicio, Vista únicas desde las habitaciones con vistas al puerto. Coincidio ademas con dos dias muy soleados Repetiremos.

La ubicación del albergue juvenil está cerca de la estación y del centro de la ciudad. El baño está en la habitación, aunque es pequeño. La calefacción de la habitación es suficiente pero no hay cortinas. Alguien limpiará la zona común todos los días. Además, no hay secador de pelo en la habitación. Tienes que ir al mostrador para utilizar tu pasaporte o DNI como depósito. Pero la actitud en la puerta de identificación del mostrador es bastante informal y siento que podría perderla accidentalmente🙃

El hotel se encuentra perfectamente ubicado para una primera visita a Estocolmo,a pocos metros andado de Gamla Stan, donde se localizan los principales monumentos. Precio bastante asequible en comparación a otros hoteles de gama similar. El hotel dispone de una pequeña piscina de agua caliente en la azotea, así como sauna y chorros con disponibilidad de frutos secos, agua y té, estos servicios son de pago. El desayuno buffet es muy completo y el personal bastante eficiente. El hotel organiza también actividades para sus huéspedes todos los días de la semana, y dispone de ping pong en el hall de todas las plantas. Habitaciones cómodas y funcionales. Lo peor quizá es el servicio de limpieza, el cual solo pasa por tu habitación si lo has solicitado el día anterior, es un poco latoso para el huésped el tener que avisar todos los días para que hagan tu habitación, no sabemos hasta qué punto esto supone un verdadero beneficio para el medio ambiente como ellos lo venden y no tanto un ahorro en personal para el hotel dado que se reduce el número de habitaciones a limpiar. Consideramos también excesivo el precio que se paga por usar la piscina y sauna (unos 26 euros de lunes a jueves y unos 36 euros en fin de semana), dado que la piscina es bastante pequeña, creo que deberían revisar esto.

El desayuno es bueno, puedes traer niños, en su mayoría adultos, la ubicación del hotel es genial, no hay estacionamiento. Las atracciones de los alrededores están relativamente concentradas, no se recomienda conducir sin conductor y la tarifa de estacionamiento es muy cara.