Tu alojamiento en Santo António

El hotel es moderno y tranquilo, habitaciones grandes y con terraza . Tiene piscina interior climatizada y exterior, que se agradecen cuando vuelves de hacer excursiones por la isla. El personal de recepción es muy amable. El desayuno era bueno pero igual todos los días, poco variado. En el pueblo donde esta situado el hotel hay bastante oferta gastronómica, pero es recomendable coche para moverse

Lindo, muy tranquilo complejo con apartamentos y habitaciones de hotel. El complejo está situado en el tranquilo pueblo de Capela, a 15 minutos en coche de la capital y el aeropuerto. Un coche es un regalo, pero sí lo necesitas para visitar esta maravillosa isla. Nuestra 2-kamerappartement era muy espacioso y limpio. Las camas estaban bien con una elección de dos cocinas. Cocina muy completa con horno, microondas, Nespresso (cupas a cambio de pago) y cocina de agua con té gratuito. El hotel quiere alentar a los huéspedes a utilizar menos el servicio de limpieza debido al medio ambiente. En caso de limpieza, recibirá un recibo de €3 al día para gastar en el restaurante. Sin embargo, 3 euros en este restaurante no vale mucho, ya que los precios son enormes: un cappuccino costa aquí 3,50 euros mientras que en toda la isla los precios del café son alrededor de 1,20 euros Debe pedir los bonos, No me pareció un sistema conveniente y la compensación no es absolutamente proporcional (€3 frente a no limpieza, toallas, cama de madera, suplemento de té y botella de agua). El restaurante donde bebimos café con los bonos nos pareció desagradable. La sauna, el gimnasio y la piscina interior y exterior no se han utilizado, así que no puedo evaluarlo. Abundante aparcamiento. Beber café agradable entre los locales de la cafetería Moby Dick en el pueblo. Supermercados Pingo Doce y Continentale cerca de coche.

En esta nueva visita a la isla de San Miguel opté por un alojamiento en la parte norte de la isla, donde hay una variedad de nuevos alojamientos. Confeso que la reserva se hizo únicamente a través de las fotos proporcionadas por el alojamiento, sin leer ninguna testimonio de antiguos huéspedes. En el momento de la reserva, me di cuenta de que el precio solicitado por el desayuno era alto, por lo que no optó por esta opción. Horas antes de realizar el check-in recibí un mensaje del alojamiento para informar los códigos de acceso al alojamiento. Es un proceso simple, aunque creo que la puerta de entrada no siempre se abre fácilmente. Aprovecho para señalar que hay una puerta de acceso al jardín/bañera (y, por consiguiente, a los alojamientos del redondo del suelo) que siempre ha sido abierta durante la noche. Creo que, en términos de seguridad de los huéspedes, deberían comprobar/remediar esta situación. En cuanto al estudio con dos habitaciones, me pareció muy bien al principio, pero se comprobó que era muy caliente durante la noche, sin posibilidad de abrir la ventana a la calle (al menos no lo hice). Para un estancia de 3 noches, creo que los productos de higiene no fueron suficientes. A pesar de la simpatía y disponibilidad de quienes nos envió los mensajes de bienvenida, lamento que en toda nuestra estancia sólo hayamos tenido contacto presencial con la funcionaria (o propietario) del alojamiento en el momento de realizar el check-out Este alojamiento tiene todas las condiciones para mejorar y ser una referencia, sin embargo no puedo ofrecer una evaluación superior teniendo en cuenta otros lugares donde yo ya he estado hospedado, teniendo en cuenta la misma gama de precios.

La tranquilidad del entorno. El resort está ubicado en la costa, justo delante del mar y bajando un caminito tienes unas piscinas naturales. También se puede caminar dando un paseo por un camino de tierra por la costa. La mañana que no íbamos para el aeropuerto, como no pudimos desayunar nos prepararon un picnic completo. A mejorar... Los precios del restaurante (menu de carta) son elevados. El servicio es lento. En el mismo salón, en barra o en la terraza sirven comidas y cenas, comida estilo platos combinados, con la misma calidad y super bien de precio.

Mosteiros Place was our second place to stay on our recent trip to Sao Miguel, before heading home. An extra bed was provided for our daughter in the living area, this was quite acceptable for us. The apartment was beautiful, clean, spacious and well appointed. Very private, quiet and relaxing. The view from the living area and bedroom was just stunning, allowing us to just gaze at the ocean and sunsets. A balcony to sit out on too. Huge bedroom and excellent bathroom. We asked for a kettle to supplement the coffee maker in our kitchen area, this was provided immediately. Breakfasts were ample and good choice. We left early on the final morning. The staff offered to provide food at the early hour for us.We declined as it was too early to eat, but the kind offer was there for us. The staff are what make this place special. So helpful and no rush, making you feel the most important person. All ladies that looked after us were super and so friendly. Car parking and easy access to the secure property. We found it easier to drive up the hill and turn around, then approach the entrance from the other direction due to the angle of the driveway, but this was no problem on the quiet road. Thank you for making us feel extremely welcome and giving us a relaxing end to our holiday.