Tu alojamiento en Palamós

Hemos estado una semana en agosto por segundo año. El precio no se corresponde con la calidad ni con los servicios. Las hamacas de la piscina son insuficientes para el número de huéspedes y, aunque no está permitido reservarlas, nadie se ocupa de controlarlo, con lo que a primera hora ya hay un montón de ellas “reservadas” por los huéspedes mas veteranos, que ya no las abandonarán en todo el día. La tarima de la piscina está en muy mal estado y aún llevo una astilla clavada en el pie. Creo que el año que viene no repetiremos. El desayuno está bien pero es poco variado. El personal es lo mejor, súper amable.

La habitación doble era penosa y cutre. Manchas en la pared, mesillas distintas (sin propósito estético) y una de ellas llena de manchas. El baño bien, solo que a nuestra llegada por la tarde no había jabón de manos, ni gel ni champú. Lo decimos en recepción y nos dicen que a la vuelta (salíamos a cenar) nos lo dan. Llegamos y el chico de la noche dice que no lo tiene. No podíamos ni lavarnos las manos! Una misera pastilla de jabón!! Flipamos. Bajamos a desayunar (sin duchar) y los volvemos a pedir. Al fin, una chica de limpieza de habitaciones nos los da. No tienen tampoco cepillos de dientes... (en un hotel??!) nos mandan al super de enfrente. En fin, no son profesionales. No volveré ni lo recomiendo.

Ya estuvimos hace un tiempo y como lo conocíamos un poco no nos importó repetir. No hay que esperar un gran lujo, es un 3* sup. y eso se nota en el estado de mantenimiento de algunas zonas, elementos del mobiliario, etc. (baldosas, puertas, etc.). Diría que está en proceso de renovación, tanto por lo que vimos esta vez, y comparándolo con la anterior, como por el video de propaganda que se puede ver en la tele del bar. Dispone de un par de piscinas, zona de césped y sombra, un bar amplio, terraza en el restaurante, etc. Si se va a tomar el sol, darse un baño en la piscina, no hacer nada y comer en la habitación, es una buena opción, asequible. La mayoría de las habitaciones dan a las piscinas, desconozco si por estas hay que pagar algún suplemento. Sin embargo, en cuanto al desayuno tengo que decir que es pobre, y eso que nosotros nos conformamos con poco. Aquí creo que hay un margen de mejora ostensible. Me sorprendió la poca gente que hacía uso del restaurante, supongo que pudiendo comer en la habitación los clientes prefieren esta opción. En cuanto al aparcamiento, nosotros pudimos dejar el coche justo en frente del párquing del hotel (que creo es de pago), y ya se ve que si se viene en temporada alta o en fin de semana de verano y en hora punta, es complicado aparcar en las proximidades. Un último apunte, hay una escala de tarifas extras por hacer el check out más allá de las 10:30h, nosotros paguemos 35€ por dejar el hotel a las 5 de la tarde. Tengo la impresión de que los check out de los hoteles cada vez avanzan más el horario.

Normalmente nos alojamos siempre en hoteles de cinco estrellas. En la zona de Platja D'Aro soliamos alojarnos siempre en hotel Salles & Spa De Cala del Pi, Hotel maravilloso de cinco estrellas. Desgraciadamente ya no nos podemos seguir alojando allí, porque desde hace unos anos es un hotel, solo para adultos. Hemos estado alojados quince días en el hotel Costa Brava en agosto con mi hija. Primero estuvimos 5 días en una habitación con vistas al comedor del hotel y dp nos cambiaron a otra habitación con vistas al mar. La habitación con vistas estaba muy bien y era muy bonita. Lo único es que están muy poco insonorizadas y se escucha absolutamente todo, incluso se escuchaba cuando vibraba el móvil de la habitación pegada a la nuestra. Los empleados de recepción una maravilla, sobre todo Susana que estaba siempre pendientes de nosotros y nos atendía siempre con una sonrisa y amababilidad increíble. Lo que no nos gustó nada ha sido el trato recibido durante las cenas y algunas comidas por parte de dos empleados muy bordes y muy mal educados. Esas dos personas son Bryan: camarero y Maria que creo que era la Maitre. Siempre que queríamos reservar una mesa fuera cerca del mar, nunca era posible, siempre nos tocaban mesas muy mal situadas. Había un favoritismo hacia ciertas personas y se notaba mucho. Una vez reservamos una mesa fuera el día anterior. Pues al día siguiente nos dice Maria que no quedaban mesas fuera. De repente aparece una pareja mayor que no había reservado ninguna mesa y les da una mesa fuera, y a nosotras nos dice que no. Vamos fatal, nos trataron muy mal. Estuvimos alojados 15 días en ese hotel y nunca se acordaba del número de nuestra habitación. Siempre fue muy borde y muy seca con nosotros. Nunca tenoa una conversacion con nosotras y no nos preguntaba nada de nada. Bryan aún peor, fue horrible. Cuando nos preguntaba lo que queríamos cenar, la mayoría de la veces se equivocaba con el pedido y nos traían otra cosa. Nos trataban con mucha soberbia y con muy malas formas. Vamos un cero a los dos. El resto de los camareros, muy bien. No aconsejo alojarse allí con ninos, porque solo hay personas mayores y no es nada divertido para los ninos. Se aburren mucho. En general mucho favoritismo hacia ciertos clientes y al resto un trato pésimo. El restaurante del hotel que dicen que tiene tanta fama, era muy normalito y muy mediocre, nada del otro mundo. Se come mucho mejor en otros sitios, como en el hotel Salles & Spa de Cala de Pi : ahi si que se come de maravilla y todos los empleados son de diez, no hay punto de comparación con el Hotel Costa Brava. A mayores de esto, no tiene piscina otro fallo más y que se agradeceria que hubiera con el calor que hace. En general, yo no recomendaría alojarse en este hotel por todo lo dicho anteriormente . Hay hoteles mucho mejor por esa zona y que te tratan como personas y no como perros.