Usuario invitado
18 de agosto de 2023
Excelente! El hotel es bonito,es antigua fábrica de luz y lo han reformado como un hotel,el jardín es grande,que se puede desayunar y cenar en el jardín. El servios es bueno,sobre todo nos a gustado el camarero Mauro,una persona muy abierta y amable,que está casi todos los días desde las 7:00 hasta las 22:30,muy atento a todo y a todos. A la hora de despedir nos han regalado mermelada y una caja de galletas,es típico postre que se toman con vino. El hotel también está bien ubicado para poder ir con coche visitar los pueblos,hasta Florencia y Pisa tardaremos 1 hora,pero lo demás bastante cerquita.