Usuario invitado
5 de enero de 2025
El hotel fué de los primeros de Cerler, precisaría una renovación. A pesar de su antigüedad se encuentra en bastante buenas condiciones. La habitación me tocó con vistas a un parque, aunque también las tienen con vistas a la montaña y a pistas de ski. El desayuno y la cena ( media pensión) es de tipo bufet, un poco escaso en su variedad y preparación, el zumo es de máquina y horrible. El personal de recepción, de comedor, de limpieza, … son excepcionales muy amables y suplen como pueden las deficiencias. Se encuentra a unos 750m de pistas, unos 10 minutos andando, el volver cuesta arriba, se hace largo. Tiene aparcamiento pero normalmente no llega para todos, suele haber más sitio cerca para aparcar.