Migueleees
12 de agosto de 2024
Una maravilla de Hotel para descansar; a destacar la tranquilidad y el silencio. Las habitaciones recién reformadas, amplias y bien insonorizadas. La comida buena y variada, aunque como punto negativo, el precio del agua, que para ser un sitio de playa, es excesivo. Mención a su personal, todos muy atentos y amables; y en nuestro caso, a tres personas en concreto: Cristina, de recepción, MªJosé, del departamento comercial, y a Yolanda, del restaurante. Ellas hicieron que nuestra estancia superase nuestras expectativas. Gracias por todo!.