Usuario invitado
2 de septiembre de 2023
Los dueños son poco agradables y no ofrecen ningún servicio. No hay comida ni bebidas. Al principio pensé que sería un lugar bucólico para aislarse puesto que tiene un caminito que lleva a la playa. Por la noche comprobé que no es un lugar seguro. Sobre las 20:00 horas un grupo de hombres comenzó a beber enfrente de mi ventana (las ventanas no tienen cristales y las cortinas son transparentes) yo estaba bastante intimidada y no salí de la habitación y apagué la luz. Sobre las 23:00 se fueron y respiré tranquila. A las 2:00 de la mañana regresaron gritando y cantando, pudieron música. Sentía como si estuviesen el lado. De hecho estaban justo en mi puerta. Escribí un mensaje al dueño para que les pidiese que se fueran a sus habitaciones. No me respondió. A la mañana siguiente cuando estaba yéndome a la playa me encontré al dueño y me dijo que quería que me cambiase a otra habitación donde estaría más tranquila. Le dije que yo estaba cómoda y que con debía hablar sería con los hombres que bebían y hacían fiesta. Insistió en que me cambiase de habitación en aquel momento. Me fui a hacer la maleta y tú e que cancelar mis planes. La Neva habitación estaba en el segundo pido por lo que al menos nadie podía estar gritando en frente de mi ventana. Cual fue mi sorpresa cuando al llegar a mi habitación por la tarde veo que tengo dos mensajes. El primero me pedía que pagase más dinero por la habitación. El segundo me amenazaba diciendo que si no pagaba más dinero me tenía que cambiar inmediatamente a la antigua habitación. Les dije que me devolviesen el dinero, que me quería ir. Me dijeron que no me lo podían devolver porque a esas horas no podían alquilar la habitación y la dueña me trató muy mal, escoltada por dos hombres me hacía reproches. Me cambié de sitio y no recomiendo shanu’s a nadie.