Camping Los Arenales

Muy buen descubrimiento. Nunca habíamos venido porque somos muy de norte, pero amenazamos con volver . Hemos estado tranquilos, como nos gusta, por eso las vacaciones las tenemos en estas fechas. En el camping se respira paz y tranquilidad. Las parcelas son muy grandes y con muchísima sombra, cosa que valoramos muchísimo por dejar a la perra dentro de la caravana e irnos a dar un baño a la piscina y dejarla a gusto dentro. Las parcelas muy llanas y niveladas. No se escucha nada, sólo el cantar de los pájaros. Quizá los baños algo antiguos. Que tenga las duchas nada más entrar y que abriendo la puerta te puedan ver desde fuera recién salida de la ducha, no es agradable. Se solucionaría fácilmente poniendo un murete delante de la puerta para obligar a entrar por los lados (no sé si me explico). Los fregaderos tienen el grifo muy bajo y para fregar cosas voluminosas te las ves y te las deseas. Es lo peor que hemos visto junto con las duchas. Los bungalows tienen muy buena pinta y la atención de todo el personal ha sido INMEJORABLE. Os aconsejo comer en el mismo restaurante porque no os vais a arrepentir. Almagro está a unos 10 minutos andando y tenéis de todo para comprar y comer. El agua a nosotros no nos ha gustado. Nos comentaron que es de pozo y al ser zona volcánica el sabor es fuerte y así es, pero beber se puede beber sin problema. La piscina tiene muchísimo césped y muchísima sombra y la temperatura del agua está perfecta. Y no olvidarnos del amor que le puso el camarero (no sabemos su nombre) al prepararme un mojito. Jamás me habían explicado tan al detalle la preparación de una bebida y nunca me ha sabido tan bueno un mojito. Mis dieces.

Sitio muy tranquilo para relajarse y descansar. La piscina muy bien y el chiringuito también. El pueblo almagro está a 1 km y tiene todo lo necesario. Estuvimos en una casita para 2., muy limpio todo en general. Seguramente volveremos. El chiringuito un poco caro

Muy recomendable, ideal para descansar, los bungalows están muy bien, con todo lo necesario, el personal es muy amable y atentos en todo momento, en general todo muy limpio, piscina muy bien cuidada y restaurante bien conocido por sus buenas carnes a la brasa. Se puede ir andando a Almagro y disfrutar de la gastronomía y de un amplio abanico de sitios culturales para visitar.