H177 Hotel

El servicio por parte del hotel fue increíble desde nuestra llegada. El check in es a las 3 pm pero muy amablemente nos ofrecieron la habitación antes ya que ésta ya se encontraba lista. Todo el personal muy amable, tienen un rooftop con una vista muy bonita. Una mini alberca muy agusto. La habitación muy cómoda, chiquita pero acogedora. Agua caliente y fría. Servicio de cafe y agua las 24 horas y por las mañanas unos deliciosos panecitos con mermelada y mantequilla. Mención especial para Javier León que nos atendió de una manera extraordinaria. Da gusto toparse con gente que ama su trabajo y es amable. Sin duda recomendaré este hotel.

Es un hotel familiar y acogedor situado a unas cuadras de la catedral por lo que es fácil desplazarse caminando el personal es muy amable te hacen sentir muy bien es un hotel con pocas habitaciones y eso lo hace más acogedor sin duda regresaría

El hotel tiene una ubicación excelente. Está a unos pasos de restaurantes y áreas de interés. El servicio de las chicas de recepción es extraordinariamente amable y atento. El hotel no cuenta con estacionamiento propio, pero ofrece una opción sin costo adicional a un par de cuadras. La habitación estaba bastante limpia, y tuvieron el buen detalle de dejar una botella de vino. Lo no tan bueno fue que cuando hice la reserva envié un mensaje preguntando si había habitaciones en PB porque viajo con una persona de la 4a edad, y me respondieron que contara con ella. Cuando llegamos resulta que por el Nivel de ocupación no me la pudieron asignar, y obviamente el hotel no cuenta con elevador. Si hubiera sabido que tendría que subir un piso, no lo habría elegido. Creo que no cumplir con lo ofrecido, aunque parece un pequeño detalle, para el huésped puede resultar en un tema mucho más relevante. Otro detalle es que rentamos una habitación que ofrecía un sofá cama como una opción para una cuarta persona en la habitación, y el sofá cama era una cosa absolutamente incómoda. Los cojines gastados, de manera que se sienten los fierros y tablas. A la cuarta persona que le tocó 'dormir' ahí, no pudo descansar absolutamente nada. Es un hotel que tiene cosas muy buenas y la relación calidad-precio es excelente. Creo que podrían cuidar cosas mínimas, no generar expectativas que no se cumplan, como respetar las solicitudes y no vender un sofá cama desvencijado como una opción de descanso, y la calificación sería muchísimo mejor.

Es una cochinada te hacen el servicio a la habitación tardísimo y si les pides que vengan más temprano te dicen que así se organizan ellos y que no es problema de ellos que tu hayas regresado a hacer un parada técnica como a las 4 pm y ya no regresan a hacer la limpieza y solo te quieren dejar tus toallas afuera.... Jajaja NO VENGAN LOS BAÑOS APESTAN Y NO ESTÁN BIEN LAVADOS.... HABÍA PELOS EN EL LAVABO Y RESTOS DE MIER&#@ EN LA TAZA... SOLO VENDRÁN A HACER CORAJES. COMO SOLO SE HABÍA PAGADO 1 DE 2 NOCHES NO NOS QUERÍAN ENTREGAR LA LLAVE. El estacionamiento esta retirado y solo funciona ciertos horarios. EL TECHO FILTRA AGUA SI LLUEVE. En recepción son unos ineptos qué no te resuelven nada.

Buen hotel para visitar Campeche. Reservamos 2 habitaciones para el fin de semana con código promocional directamente en su página web por un buen precio. Habitaciones y baños muy cómodos y completos. Hay café y pan de cortesía por las mañanas. El H177 tiene una inmejorable ubicación, a media manzana de la calle principal del centro "la 59", menos de 5 minutos caminando de la plaza principal y la Catedral, a 8 minutos caminando del Malecón. Dispone de parking externo. La habitación fue suficientemente amplia para dos adultos, especialmente destacable la limpieza de la habitación y el trato del personal. Desde luego, recomiendo el hotel para quien esté pensando en alojarse en Campeche.

Fuimos con motivo de un viaje de pareja! Queríamos conocer la zona y decidimos hospedarnos en este precioso hotel! Las instalaciones impecables, todo súper limpio y cuidado al detalle, no faltaba nada! La habitación súper bonita y la cama súper cómoda. Tienen una terraza Preciosa desde donde se puede ver toda la ciudad y una piscina súper bonita dentro del hotel. El servicio que nos atendió súper simpático, nos ayudó en todo y nos recomendaron sitios donde comer. Se preocupaban por nosotros y nos hicieron sentir como en casa! Estoy segura que si vuelvo repetiría sin pensarlo!! Debe de haber más sitios como este.