Pestana Fisherman Village

He pasado una semana alojada en este hotel junto con mi marido. El hotel está situado en la parte de Cámara de Lobos con más ambiente, junto al puerto y en una zona llena de restaurantes y bares. Para aparcar se puede hacer en la zona de aparcamiento público y de pago que hay junto al puerto. Es un hotel con aires marítimos, muy bonito, con una decoración muy cuidada y varias zonas con sofás y sillones. También hay una zona con un billar, además de biblioteca y piscina, aunque en nuestro caso no hicimos uso de ninguna de estas cosas. La habitación con buen tamaño, armario abierto, caja fuerte, nevera y escritorio. Nos habían dejado en la cama una caja de galletas de la fábrica de Santo Antonio y dos chocolatinas, además ponían una botella de agua gratuita a diario. La cama muy amplia y cómoda, televisión con canales internacionales (en español TV1 Internacional). Baño amplio, aunque eché de menos más amenities teniendo en cuenta la categoría del hotel, contaba con gel-champú, gel de manos y gorro de ducha, pero no había por ejemplo alguna loción corporal, que suele ser habitual. Nuestra habitación daba al patio interior donde se podía tomar el desayuno. Esto fue importante porque entre semana no se oía nada, ni de la calle, ni de otras habitaciones, sin embargo la primera noche que pasamos allí que fue sábado de madrugada hubo bastante jaleo de gente gritando y hablando (la parte negativa de estar en una zona con ambiente). En verano no sé si será muy ruidoso, pero fue de temporada, dormimos muy bien. El desayuno muy bien, además prácticamente teníamos el bufet para nosotros solos porque coincidíamos poco con otros huéspedes. Había de todo: dulce, salado, panes, zumos de varios sabores, fruta... Sí eché de menos algunos detalles, como por ejemplo que las tortitas estaban frías en vez de mantenerlas calientes. Algún día alguna fruta me pareció un poco madura también y el café era de máquina. En general todo bien. Atención correcta y amable. En definitiva, muy buen hotel a un precio muy bueno.

Nada más llegar la hotel, que se encuentra en una calle preciosa, las chicas de recepción fueron súper amables y nos ofrecieron una bebida de bienvenida mientras esperábamos a que rellenaran nuestros datos. El alojamiento es precioso y está impecable. Las habitaciones están muy bien insonorizadas, no se oye nada del exterior cuando cierras la ventana. Tiene todo lo que necesitas. El desayuno es súper completo, tiene muchísima fruta, lo cual es de agradecer. Lo recomendaría 100%. Tiene aparcamiento cerca y la localización es ideal para poderlo moverte y recorrer toda la isla