Barceló Aguamarina

Fue un regalo a nuestra madre en su 80 cumpleaños y la experiencia ha sido fantástica. Este hotel tiene una ubicación ideal , es super cómodo para disfrutar en familia. Hay bastante gente pero no te estresas, al reves te relajas mucho. El hotel es precioso, muy nuevo y decorado con muy buen gusto. Tiene algunas cosas a mejorar de los baños como el espero oxidado de la humedad o el bater amarillento pero a mi eso no me ha afectado en mi estancia. El personal en general super amable. La calidad de la comida es muy muy justita, si te gusta todo y no eres sibarita , no tengas problema, ahora bien, si lo eres, no te gustara la comida. Nosotros teníamos todo incluido y nos íbamos a cenar fuera. Tienen un restaurante a la carta y quizás este muy bien pero no lo hemos probado. Creo que por lo que pagas tampoco se puede pedir mucho mas .Mi única pega la comida.

Han sido las mejores vacaciones de mi vida. Hemos estado tres días y nos han sabido a poco. Es un hotel increíble y se nota que la dirección del hoteles se preocupa mucho por el bienestar de los clientes. Muy contentos con todo el personal, nos han tratado como reyes.

**Ubicación:** Cala Ferrera, Mallorca, España Es un hotel donde estuvimos alojados en el pasado, antes de las reformas del mismo y el cambio de nombre. La puntuación que daré será de 1 a 10 (teniendo 10 como máximo y 1 como deficiente). **Duración de la Estancia:** 7 días y 6 noches. Lamentablemente, tuve un pequeño percance antes de llegar al hotel que me impidió caminar largas distancias durante la mayor parte del viaje. Vacaciones de relax en familia. Habitación elegida: Vista al mar. A la llegada al hotel, estaba muy exhausta por el largo viaje y los retrasos del avión. Hicimos el check-in muy rápido y luego fuimos a cenar en el restaurante bufé del hotel a media hora de su cierre por esa noche. Nos recibió el maître, una persona muy amable y afable, creando la atmósfera justa para hacer sentir en casa a cada huésped. El bufé era maravilloso, con varias estaciones de comidas, frutas y postres. Todo el personal presente esa noche y, en general, cada día, muy amables y precisos en los estándares de calidad del hotel. Todos manejan el mismo lenguaje de estándar y se ve y se siente. El chef es una persona maravillosa y de un alto nivel de trabajo; la comida es de muy alta calidad en la materia prima. Pienso que es el precio justo por tan alta calidad, más el plus que es el personal que allí trabaja. La parte menos positiva es la calidad de las bebidas del restaurante bufé. **Bares:** Es el mismo estándar de calidad de servicio observado en el restaurante bufé, pero aquí el menú de bebidas no es muy largo para el paquete “all inclusive”, pero incluye lo más pedido en cualquier bar de playa en cualquier parte del mundo. Para mí, es un menú de bar muy inteligente. Algunas otras bebidas de marcas específicas se pueden pagar aparte sin gastar mucho dinero por ser un cliente “all inclusive”. **Punto snack bar:** Es muy fresco después de la reforma, muy estilo ibicenco como decoración. Te sientes de vacaciones al mar, solo basta la vista al mar, que creo lo penaliza un poco. La preparación y rapidez de las bebidas es óptima, y la cordialidad y la sonrisa en la atención al cliente es perfecta, así como ya mencioné en el bufé. El snack es decente, pero preferiría un bar de tapas con vista al mar en esa área más que un snack bar. **La disco:** Lamentablemente, fui dos veces, pero fue la reforma del hotel que más me impresionó. Pasó de ser un viejo sitio con alfombras malolientes a un espacio moderno, bien acondicionado, con amplias áreas y muebles para sentarte a tomar un drink o ver deportes en una de sus grandes áreas de TV, o jugar billar mientras ves el show de animación desde los grandes vitrales sin ir directamente al exterior donde está la pequeña área de espectáculos. Es una maravilla. Pienso que cada espacio de este bar ha sido bien pensado en el mínimo detalle para disfrute de los huéspedes del hotel. **Restaurante a la carta:** Lamentablemente, por motivos de salud, tuve que cancelar la reserva. Así que solo opinaré de l

Hemos pasado 8 días increíbles en este hotel. La habitación Deluxe con vista al mar es un espectáculo, merece la pena pagar un poco más por disfrutar de las vistas al amanecer. El personal de recepción son muy profesionales, diligentes, amables y rápidos. La piscina con vistas al mar con el servicio de bar justo al lado es una sensación única, desde luego es otro nivel de experiencia. El servicio de comedor es muy correcto, mucha variedad en la comida y bastante amplitud en el horario, no hemos sentido en ningún momento agobio a la hora de comer. Las instalaciones en estado muy óptimo y limpias. En definitiva, ha sido un placer la estancia en el hotel. Nos hemos quedado con ganas de pasar más días.

El hotel está bastante bien, actualizado, la decoración es agradable, limpio. Situado en una cala, tiene muy próxima una calle comercial bastante animada pero a unos 15 minutos está Cala D'or, mucho más grande, más animado, mucha gente bares y restaurantes y tiendas de todo tipo. Queda retirado del aeropuerto. Para visitar la isla, al no estar ubicado hacia el centro de la isla, se hacen bastantes kilómetros en ida y vuelta. La comida no es para tirar cohetes, es muy abundante, reponen hasta casi terminar el horario, pero es un poco repetitiva y bastante mejorable en el cocinado de carnes y pescados. No obstante la estancia ha sido muy agradable y hemos descansado muy bien.

Este ha sido nuestro cuarto año consecutivo alojándonos en Aguamarina para cerrar el verano. Como siempre no nos ha defraudado, la atención del personal y la calidad del hotel inmejorable, gracias por todo. Tiene buena ubicación, el buffet es completo y variado, muy recomendable. Sin duda el próximo año repetiremos!

El hotel dispone de todas las comodidades, ubicado en una cala en el mar para no tener que moverte mucho si quieres tranquilidad, las habitaciones están bien, cómodas y confortables, tiene dos piscinas, una más o menos grande con un pequeño bar para familias y otras más moderna cerca de la playa aunque bastante pequeña, lo mejor sin duda el restaurante magical, que te incluyen si utilizas su servicio de todo incluido, el cual recomiendo si vais a pasar mucho tiempo en el hotel cómo hice yo, tiene otros 3 bares, uno cercano a la playa muy bien por si quieres tomar algo mientras tomas el sol o te relajas, otro tiene un servicio de snack aunque en un tiempo bastante limitado, y luego el último Bara tarde noche para los espectáculos que ofrecen, lo mejor de todos diría el personal, el wifi un gran problema por qué no funcionaba dentro del hotel asique como si no existiera.

Es el segundo año que acudimos a este hotel. En nuestra opinión, tiene una ubicación inmejorable. El personal es muy atento, y la comida del buffet me parece que tiene una calidad superior a la de otros de la misma categoría en la que he estado. Quizás la variedad no sea enorme, pero todo lo que cocinan está exquisito. Resaltar, los snack a los que tienes acceso en el todo incluido. Variedad y cosas diferentes (la verdad que sándwiches, hamburguesas y dulces como en todos los hoteles que tienen este servicio me parece insuficiente), sin duda está en el top 3.

En pocas palabras,es un hotel maravilloso,con su calita a pie del hotel ,el trato del personal es maravilloso