Usuario invitado
15 de julio de 2024
Acabamos de volver de pasar 9 días en este hotel y nuestra estancia ha sido fantástica. El hotel tiene muchísimo encanto en una ubicación ideal sobre una de las calas más bonitas de la isla y en el mismo centro del pueblo. En cuanto al hotel, es perfecto, decorado con mucho gusto, con ambiente muy tranquilo y familiar, y un desayuno riquísimo en la terraza junto a la piscina y con vistas al acantilado. Exactamente 170 escalones le separan de la cala, pero que se pueden hacer con cómodos descansos a la sombra. Muchas gracias a Roberto, a su hija, y a todo el personal del hotel que nos han hecho sentir súper cómodos.