Tanguero Hotel

Un hotel inolvidable, es mi opinión que( como siempre ), dividiré para expresar con claridad este concepto. 1.- Ubicación e Infraestructura. Hotel muy céntrico, ubicado en calle Suipacha casi esquina de Avenida Córdoba. Cercano al Obelisco , a la Avenida 9 de Julio, a las calles peatonales Florida y Lavalle, rodeado de mucho comercio en general, buenos bares y restaurantes, en fin , excelente ubicación. Como presentación, el hotel muestra una delicada ambientación Vintage , basada en la esplendorosa época de oro del Tango, finales de los 40s, comienzo de los 50s. Su recepción, el comedor, las habitaciones, los baños, son espacios pulcramente limpios, muy bien cuidados y presentados. En el pequeño comedor, hay un par de vitrinas con fotografías y objetos personales de artistas y gente famosa de la época, además hay una pintura que representa un escenario típico de un teatro de esos años, información que enriquece la cultura de nosotros los turistas, lo cuál se agradece. Las habitaciones alfombradas, son espaciosas y muy cómodas , también ambientadas en estilo vintage, con una estupenda cama, un escritorio y un par de sillones. El baño, siempre limpio ( se nota la preocupación en este aspecto ), cuenta con algo poco usual , un bidet, gratísima sorpresa. 2.- Alimentación. El hotel no dispone de un servicio de restaurante integral, solo ofrece desayuno buffet, que por cierto me atrevo a calificar como excelente. Naturalmente no está a la altura de los "exclusivos resort del caribe", pero ofrece además de té y café ( Excelente ) , jugos, variedades de pan y queques, jamón, queso, yoghurt , frutas y las infaltables y sabrosas medialunas. Es decir todo lo que se necesita para empezar bien el día. 3.- Atención y personal. Es lo que llamaría la "Guinda de la torta", si todo lo descrito anteriormente es muy bueno, este aspecto es extraordinariamente bueno. Las chicas que atienden el desayuno son muy dijes, se esmeran en la atención con mucha simpatía y cordialidad . Lamento y me disculpo de no haber tomado su nombre para destacarlas. Los muchachos de recepción son un 7, partiendo por Emiliano, siempre estuvo atento a resolver y ayudar, incluso mas allá de su obligación laboral atendió nuestros requerimientos de consejos sobre lugares a visitar, también actividades en las que nos ayudó con las reservas logrando mejores precios en ellas. En fín, todo un personaje tremendamente amable y eficiente. Debo destacar además a Sergio y Exequiel, 2 personas que se preocuparon de estar siempre dispuestos para atendernos con suma gentileza y cortesía. Finalmente destacar a su Gerente, una señora encantadora que tuvo con nuestro grupo una cortesía que nos sorprendió gratamente y que por supuesto le estamos reconocidos. Una persona que siempre la vimos llegar saludando a todo su personal con una sonrisa y un beso en la mejilla, mas que a colaboradores parecía saludar a su familia. Cada día se acercaba a nosotros durante el desayuno, para preguntarnos como estábamos,