Usuario invitado
26 de julio de 2022
La ubicación de los apartamentos es inmejorable, ubicándose en la plaza de la Szent István-bazilika. Los apartamentos se ubican en un edificio de viviendas, por lo que la recepción está en un el primer entrepiso, mientras que las habitaciones se ubican en otros pisos. El apartamento cuenta con una decoración juvenil muy linda, renovado y con buena iluminación, aunque es super chico, casi dificultándose la movilidad y compartir espacio entre dos personas. La cama es super cómoda, bien calefaccionada y sin ruidos del exterior. El baño está completo, con lo necesario para su uso. Además cuenta con mesa y silla, como así también un microondas, un calentador de agua, cafetera, refrigerador y vajilla para 2 personas. Entregan infusiones de cortesía (lo justo). La recepcionista podría ser más simpática y hablar en inglés para facilitar la comunicación. Debería mejorarse el ascensor (elevador), ya que es muy antiguo y el día que nos retiramos se quedó parado unos largos minutos con nosotros adentro. Sin lugar a dudas recomiendo el hospedaje por la ubicación.