Usuario invitado
31 de enero de 2023
Puede ser uno de los peores hoteles en los que me he hospedado en mi vida. La primera mañana nos hicieron la cama perfectamente. A partir de la segunda, dejaban la colcha de la misma doblada encima de la mesa, sin poner, y en vez de sábana bajera teníamos dos superiores que se salía todo el rato al dormir. El gel/champú, a parte de escaso, olía fatal y limpiar.. poco. La tele super antigua, y no servía. El TDT es externo y no encajaba bien, y para verla tenías que enchufar y desenchufar todo el rato, y cuando conseguía servir, a los 10 minutos se iba de nuevo.. El internet para Apple no sirve. El bufet... de pena. Solo había patatas fritas y lomo y un tipo de pescado. A parte, salmón frio, alitas al horno crudas y para hacer una ensalada paupérrima.. Como anécdota, en el postre tomamos sandía la cual colocamos en un plato en la mesa, y fuimos a por otra cosa quedándose la mesa sola durante 1 minuto. Cuando volvimos, nos encontramos la sandía tirada en el mantel (4 trozos), pues habían recogido el plato y tirando la fruta, pensando que nos habíamos ido ya. Éramos los únicos que quedaban en el buffet y aún no habíamos pagado. Antes de recoger nada, asegúrate de que hemos acabado. Tuvimos que acabar la comida con todo sucio. La piscina es super pequeña. Con 4 personas dentro, ya está a tope. Lo único bueno, la ubicación y la simpatía de los recepcionistas.