Usuario invitado
15 de marzo de 2024
El ambiente del hotel se siente seguro y tranquilo, probablemente por su ubicación junto al Pentágono. De vez en cuando se ven personas con uniformes militares.
La seguridad y el saneamiento en Washington son mucho mejores que en Nueva York. Lo único es que el transporte no es muy conveniente. No hay metro, y hay que tomar un autobús que recorre unas 11 paradas hasta la estación.
El personal de recepción y el hotel en general son bastante budistas y amables. El desayuno incluye un poco de pan, cereales, leche y café, nada más. No tenemos grandes exigencias, solo limpieza, así que desayunamos en el hotel.
La habitación está limpia, pero no hay edredón. Es una tela similar a una sábana, separada del edredón. Es fácil desalinearse al dormir, y aun así se siente un poco aislado.
Texto originalTraducción facilitada por Google