Inigo
3 de septiembre de 2022
El hotel en sí es increíble pero:
- La puerta de la ducha no cerraba correctamente y, por lo tanto, teníamos "inundaciones" todos los días en el inodoro.
- Mosquitos: Entiendo que estamos en un ambiente "salvaje" pero era increíble cada vez que abríamos la cortina de la terraza como caían muchos mosquitos. Durante la noche, ir al baño también fue una experiencia. Demasiados mosquitos... deberían intentar hacer algo con esto.
- Comidas: no incluyen bebida, es normal hasta que te cobran 3'5€ por una botella de agua abierta cuando deberían servir o al menos dar la opción de tenerla gratis ya que la ley lo dice.
- Checkin: la chica del mostrador nos acaba de decir, "oye, escanea este código QR y todo está explicado", ¿por qué debo descargar una aplicación del hotel? ¿Es tan difícil explicar en pocos segundos todas las actividades del hotel?
- Desayuno: La calidad de la panadería es peor que la de cualquier otro hotel que probé...
Hablando de comodidades, el hotel es perfecto, grandes piscinas, bonita decoración, el buffet estaba bien y tiene acceso directo a la playa. Es una pena que el servicio no esté al nivel de Barceló.
Texto originalTraducción facilitada por Google