Hotel ibis Budget Madrid Alcorcon Móstoles

Es una gran opción para ir a Madrid y, en nuestro caso, al parque Warner, ya que nos quedaba justo de camino. En pleno cruce de la M50 con la autovía A5, con lo que no tienes que meterte en el casco centro de Móstoles, pero el problema es que el acceso es un poco lío, por un camino sin aceras desde un Burger King. Es muy de agradecer que hay parking cerrado y gratuito suficientemente amplio, pero el tema es que no hay aceras si quieres acercarte al núcleo urbano (que realmente está allí cerca) y resulta un tanto peligroso especialmente por la noche. Como digo, es también una buena opción para ir a Madrid, ya que es barato, y en 30 minutos te pones en Atocha con el "Cercanías", aunque es cierto que tienes unos 15-20 minutos andando del hotel a la estación de tren. En cuanto al hotel en sí, la habitación dentro de los estándares de los "Ibis", bastante bien para únicamente hacer noche aunque sí que las almohadas individuales son incómodas para dormir (una pena porque las camas están muy bien). La conexión wifi perfecta y la amabilidad de los trabajadores del hotel "de 11". A nuestra hija le dieron una bolsita de gominolas, lo cual es todo un detalle. Cuando volvamos a Madrid, repetiremos en éste o en cualquier otro Ibis.

Habitación pequeñita, pero camas y almohadas muy cómodas. El personal muy amable, estancia muy agradable. Para lo que queríamos que era pasar la noche después de estar todo el día en la Warner genial. El desayuno no tenía mucha variedad, pero para nosotros suficiente. Buena relación calidad precio

Caro para lo que ofrece.El desayuno tiene un precio de 4 estrellas .Se aprovechan de uq es el unico hotel en la zona, ni una peueña neverita para guardar los alimentos de los niños.Una verguenza.No te permiten estar con tus dos hijos en la misma habitacion.En conclusion ,no es un hotel para familias.

Buena relación calidad precio, sabiendo a dónde vas. En este caso el hotel olía raro, los pasillos y la habitación. Habitación con lo justo para pasar la noche y continuar ruta, 302, el aire acondicionado hacía bastante ruido. El desayuno bastante bien para el precio.

La peor experiencia jamás vivida en un hotel, nunca había estado en un hotel Ibis pero seguro estoy que esta fue la última. La ubicación PESIMA, detrás de una gasolinera, con sensación de suburbio. El acceso a la altura de la ubicación, nada intuitivo y muy escondido. Mucho cartel de hotel libre de humos (como si el resto de hoteles no lo estuvieran), incluso con carteles exponiendo la cuantía de la sanción, pero la habitación (305) oliendo peor que si hubieran fumado 2 paquetes. En el baño ni un misero tubito de pasta dentífrica. Para más INRI a la 1:39 de la madrugada salta la alarma antiincendios (en cualquier establecimiento puede suceder) y al parecer era un cuadro de automáticos en la recepción..., obviamente a partir de ahí se acabó el descanso, sin recibir ni una simple disculpa. El precio muy por encima del producto ofrecido. A resaltar la profesionalidad y buen trato y disposición de TODO EL PERSONAL, que seguro que no están valorados a la altura de sus merecimientos.