Tu alojamiento en Al-Ula

«Me preocupaba quedarme en el hotel sin electricidad, teniendo en cuenta las habitaciones oscuras y la falta de calefacción, pero mi experiencia fue más allá de las expectativas. El hotel está situado en una parte de la antigua ciudad, justo en medio de todo. No podía haber deseado un mejor alojamiento.»

«If you’re looking for the perfect getaway, Shaden Resort is a top choice. Nestled in an ideal location, it’s not only incredibly clean but also conveniently close to all the major attractions. The combination of these factors makes it an excellent choice for both relaxation and exploration. From the moment I arrived, I was impressed by the meticulous attention to cleanliness and detail. The rooms were immaculate, and the resort’s overall ambiance was both welcoming and sophisticated. The proximity to local attractions was a game-changer, allowing me to effortlessly explore the area without the hassle of long commutes. In summary, Shaden Resort offers the trifecta of location, cleanliness, and convenience, making it a perfect base for any traveler. Highly recommended!»

«酒店沒有Alula到旅遊地圖和旅遊指導，自駕困難重重： 1，hegra不知道如何去，North gate ?south gate？導航困難。後來知道375…9200…70 2、也沒有景點的營業時間，13：00到大象巖，説16：00開門，15：40到了黑格拉，已關門。 國際酒店都有旅遊宣傳單和地圖等，旅遊團沒問題，自由行有困難，希望改進。»

«En comparación con el Banyan Tree, las instalaciones están un poco anticuadas, ¡pero el servicio y el ambiente sanitario son excelentes! El hotel también cuenta con muchas experiencias e instalaciones interesantes, como camas elásticas, columpios, cines con cielo estrellado, yoga en el valle, etc... Las esculturas repartidas por todos los rincones del valle también son muy interesantes.»

«The service provided was excellent, facilities ok, the food was good, location is amazing, even if a bit far from Alula. All the staff is very professional and friendly. Special mention for the guys at Caravan reception, the 2 Mohammed. Amazing experience, once you leave, you want to go back.»

«El servicio del hotel es muy bueno. El ambiente y el servicio son increíbles. Afuera del hotel (no cerca del hotel, a unos 3 kilómetros de distancia), estaba aprendiendo a atar un pañuelo en la cabeza en el auto. Vino un hombre saudita y me ayudó a atar un pañuelo en la cabeza que no sabía en ese momento. El gerente del hotel. No lo supo hasta que regresó al vestíbulo y descubrió que era el gerente del hotel. Realmente entusiasmado. Todo el personal es amable y educado. Pero una mujer con rostro asiático realmente no es buena. Ni siquiera saludé.»